Desbocados

Con la emoción de que nuestra ratita amarilla inició la “Nueva Normalidad”, como el único estado que no chilla en rojo y los anuncios por aquí y por allá de la reactivación económica en muchos sectores de la entidad –muy necesaria, quién dijo que no–, los habitantes de esta tierra colorada ahora sí desbocados como cabras no dejan de llenar las calles en la zona metropolitana y sus municipios y de seguir atiborrando la estadística con el incremento de casos por el COVID-19, hecho que of courseya nos valió una regañada del doctor Guapell en plena conferencia de las siete.

Reconocimiento

Aunque ya son 139 los recuperados, no deja de ser preocupante que la gente relaje las medidas, se aviente al voladero, se pase como Pedro por su casa y ponga en jaque el maltrechito sistema de salud, más aún echando al traste el esfuerzo de las autoridades y de los que sí se guardaron prudentemente en sus cantones. Por eso ya enchirimbados no nos cansaremos de decir: quédense en sus casas ALV, si es que sus trabajos se los permite.

Restaurantes y hoteles van

Y aunque la pandemia está cabrona, pues ya el gober Alejandro Tello y los dinerosos de Zacatecas se pusieron de acuerdo para reabrir los hotelitos y restaurantes, eso sí, con todas las medidas necesarias de prevención para que el bicho no alcance a trabajadores y clientes. Pero pues como la cosa está que arde, este es en un tema urgente para un estado que depende de esta industria, que por los números rojos y vérselas negras, se ha puesto chida y ha tratado de no despedir a sus empleados en estos meses de pausa económica.

Otros no la libraron

Lo que ha causado sorpresa es que en estos dos meses de contingencia hubo quienes no la libraron y de plano tuvieron que bajar la cortina de sus negocios, algunos ya con varios años de tradición y generadores de fuentes de empleo, pero también pequeños changarritos que, se quiera o no, también siguen siendo la principal fuente de ingreso de chingos de familias. Y si la gente sigue de zorenca abriéndole la puerta al bicho al no respetar las medidas preventivas, esa Nueva Normalidad se nos irá de las manos y la posibilidad de que la economía se reactive en Zacatecas.