Vero Díaz, la (súper) delegada de Programas para el Bienestar más gris de la 4T, de quien últimamente solo conocíamos sus felicitaciones de cumpleaños a los Servidores de la Nación y una que otra efeméride, ahora sí se puso a chambear a prácticamente nada de que inicie el próximo proceso electoral. Lááástima que otros perfiles (también mujeres) ya le llevan amplia ventaja rumbo a la candidatura por el Distrito federal 4 con cabecera en Guadalupe, como la propia subdelegada Priscila Benítez, esa que un día sí y otro también se reporta en redes dándole a la talacha, pero también Caty Monreal, quien más allá de aspirar o no a la dirigencia estatal de MORENA, se ha fletado apoyando a la racita y promoviendo los círculos de lectura (“La Infamia” incluido) para formar a las militancias previo al proceso electoral. Vero Díaz mejor se hubiera quedado como diputada local. Total, entre tanto flojo legislativo, ni se hubiera notado su ausencia.
Jehú, a clases al IZEA
Tan propio que es don Arturo Nahle, mandamás del Poder Judicial, quien este fin de semana estuvo de plácemes por su cumpleaños. Las redes se llenaron de felicitaciones por aquí y por allá, un tanto para compensar que esta pandemia no permite los abrazos físicos y, por aquello de la Sana Distancia, menos las aglomeraciones. Nomás que al secre de Gobierno, Jehú Salas, o a su asesor, deberían mandarlo al Instituto Zacatecano de Educación para Adultos (IZEA), que dirige el buen Carlos Peña, porque vaya que esa felicitación que se chutó, aparte de cambiarle el nombre al magistrado presidente por “Nahale”, tenía una redacción taaan artificial que hubiera sido más cálida una tarjeta prefabricada, de esas que venden en el Walmart. ¿Y así quiere aspirar a algo en el 2021?
Transparencia, a un nuevo nivel
En el Instituto Zacatecano de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (IZAI) llevaron más allá lo que conocemos como transparencia. Y es que con esto de la pandemia por el COVID-19, muchos godínez fueron enviados a sus casitas para laborar desde ahí y así evitar la movilidad que propague el mentado bicho. El pedo ahí es que por muchos protocolos que se hayan diseñado para el “home office”, hay unos vivales que ya le saben a las mañas y ¿quién vio? Sin reloj checador, sin registro de entradas o salidas, mientras cumplan con la chamba (o hagan como que hacen), creen que no hay pedo. Peeero ahora en el IZAI les pusieron la vara muy alta los magistrados Samuel Montoya, Norma Julieta del Río y Fabiola Torres, porque semana a semana están subiendo a su sitio web un reporte detallado de la productividad en cada área para transparentar la chamba realizada desde casa y que no le digan, que no le cuenten, que nomás cobran y ya ni siquiera se molestan en calentar la silla. Y con 1 mil 212 acciones en la última semana, en el IZAI demuestran que sí pelan un chivo a nalgadas en todas las áreas. ¡Amooos!
¿Qué van a informar?
Comienza la cuenta regresiva para los informes del último año y arrancan esta semana. Ya andan varios con sus promocionales, como la senadora Geovanna Bañuelos, cuyos videos bien podrían llevar el audio de “La Rosa de Guadalupe” y no pasa nada. Faltó el remate tipo “porque soy mujer y soy mexicana” (y aspira a la gubernatura de Zacatecas, aaaamooos). Quedamos.