Al más viejo estilo de la política más rancia, esa que originalmente buscaba combatir Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), se reunieron en un hotel de la Ciudad de México las cúpulas de este instituto político y del Partido del Trabajo (PT) acompañados de varios perfiles, entre ellos algunos zacatecanos.
En la encerrona estuvieron no solo los dirigentes Mario Delgado y Alberto Anaya. También se vio a la secretaria general de MORENA, Citlalli Hernández; a la senadora Geovanna Bañuelos; al diputado Gerardo Fernández Noroña; incluso a la edecán y excandidata migrante Giselle Arellano.
La reunión se da a unas horas de que se presenten modificaciones a los convenios de coalición ante la Comisión Nacional de Elecciones de MORENA. Ya lo había señalado Citlalli Hernández hace unos días: la coalición MORENA-PT-PVEM-PANAL de momento abarca 151 de los 300 distritos federales de mayoría relativa y habría posibilidades de llegar a más de 200.
Nunca dijo a qué partido cederían espacios. Lo que fue evidente es que el PT se le adelantó al Partido Verde y al diputado Carlos Puente en las negociaciones, y eso que el legislador zacatecano es el más interesado en imponer a sus cuadros, como Jorge Miranda Castro para el caso de la alcaldía de Zacatecas. ¿Tenían razón quienes decían que las decisiones se tomaban en las cúpulas?
Es que ya cambiaron…
Más allá de que la encerrona también pudiera significar el regreso de Giselle Arellano, e incluso la posibilidad de ver a Geovanna Bañuelos en la boleta, mucho se comentó la forma en la que se reunieron las cúpulas, como tratando de ocultar que en la 4T sí siguen siendo los mismos.
Pero los pecados de algunos aliados pueden ser perdonados si juran por las cuatro transformaciones que ahora estarán del lado correcto de la historia.
O algo así dio a entender el alcalde Ulises Mejía Haro, quien a propósito del proceso interno para definir la candidatura a la Capital aseguró primero que era incongruente siglar esta candidatura al Partido Verde al ser uno de los partidos que más atacó a la coalición Juntos Haremos Historia, pero segundos más tarde les dio la bendición y dijo que el siglado no es necesario, que cualquiera puede inscribirse y participar… y que la gente decida.
Solo que, ya se vio, hay decisiones que se toman en las cúpulas, a escondidas, en la clandestinidad. Ya lo de las encuestas y el discurso del respaldo ciudadano es mero trámite, o eso están dando a entender, incluyendo a Citlalli Hernández, quien ya anda como la Chimoltrufia y entre el dicho y el hecho, ya va sacando el cobre. ¿Cómo creerle en adelante?
Nueva fórmula en Guadalupe
Siguiendo con el tema electoral, este miércoles también fue presentada la actual diputada local Carolina Dávila como la propuesta del Partido Revolucionario Institucional (PRI) para el Distrito 4 federal, aunque anteriormente también se había registrado como aspirante para la alcaldía de Loreto junto a Octavio Monreal Martínez.
¿Y ese cambio repentino? Pues quizá para completar la cuota de paridad en las candidaturas o tal vez su perfil no es el favorito para la alcaldía de Loreto y decidieron moverla a una región con más posibilidades, sobre todo donde podría hacer fórmula con el profe Osvaldo Ávila, a menos que Fredy Barajas (el gran ausente) le gane la candidatura en los tribunales.
Por lo pronto, la presentación de Carolina Dávila como precandidata para el Distrito 4 federal se realizó en el Comité Municipal del tricolor, donde también estuvieron el propio Antorcho, Hermann Hernández, presidente del comité municipal; así como Karina Macías y Jairo Mendoza, ambos precandidatos a la diputación local por el Distrito 4.
Ahí, entre porras y aplausos de un petit comité, destacaron cualidades de la hoy diputada local, como su capacidad, experiencia, preparación y disciplina, y seguramente hará buena mancuerna con los perfiles que ya se manejan para abanderar la fórmula en esta región con cabecera en el municipio de Guadalupe.
¿Y el empoderamiento de la mujer?
No todo es miel sobre hojuelas y por muchas caras de mujeres que se vean en los próximos días, hay algo que todos los partidos tienen en común: se comen el presupuesto asignado a actividades para la promoción política de la mujer y lo destinan a otras acciones.
En sesión de la Comisión de Igualdad de Género y No Discriminación (CIGND) del Instituto Nacional Electoral (INE), consejeros y partidos analizaron los conceptos de gasto que planean hacer los partidos en sus Programas Anuales de Trabajo 2021 y aunque por ley los 10 partidos deberán dedicar 157.5 millones de pesos para este fin, todos se hicieron de la vista gorda.
El más mañoso fue MORENA, que tendrá un presupuesto de 49 millones 91 mil pesos para estas actividades, pero decidió erogar 5 millones en la impresión del periódico Regeneración, ahora con perspectiva de género, para justificar el gasto. ¿Y el resto? Los mismo que la mayoría de los partidos: actividades no relacionadas con la promoción política de las mujeres.
Quizá el menos peor sea Acción Nacional, así como los tres partidos de reciente creación: Encuentro Social, Redes Sociales Progresistas y Fuerzas Progresistas. Su propuesta fue varios talleres y capacitaciones, a los que el INE únicamente pidió alinear los objetivos y metas y establecer un marcador de medición de resultados. ¿Importan las mujeres? Para algunos, solo en el discurso.