Maribel, presidenta

Los constantes agravios de la secta legislativa por fin tuvieron sus consecuencias. Lo vivido este jueves en el Ágora González Echeverría, en Fresnillo, fue más que una sesión solemne de la 64 Legislatura. Se trató de un acto de definiciones políticas frente a la coyuntura que se avecina para MORENA y sus aliados.

Desde los preparativos ya había cierta tensión, a tal grado que hasta el mismo diputado Ernesto González Romo se involucró en las tareas de logística, moviendo sillas, distribuyendo los lugares para invitados especiales y cuidando cada detalle para evitar un «error».

Y es que hubo quienes pretendían colocar emblemas de sus gobiernos y hasta mamparas institucionales cuando el Ágora, por decreto, había sido declarado como recinto oficial expresamente para la sesión solemne con motivo de la declaratoria de Fresnillo como «Ciudad Histórica» y, como tal, debían aplicarse las mismas reglas que en la sede del Poder Legislativo: en el pleno solo puede haber símbolos patrios y nada más.

La cita fue a las 12 del mediodía y uno a uno fueron llegando invitados especiales como los expresidentes municipales de Fresnillo, regidores, empresarios, académicos, artistas y creadores de El Mineral, e incluso funcionarios del «gobierno de la transformación» como la secretaria general de Gobierno, Gabriela Pinedo Morales, y el secretario de Turismo, Le Roy Barragán. Y aunque también estaba contemplada la presencia de la secretaria de Administración, Verónica Yvette Hernández López de Lara, esta finalmente no llegó.

No pasó desapercibido el hecho de que don José Bonilla Robles fuera movido de su silla para cederle su asiento «preferencial» al exdiputado local Omar Carrera Pérez. Unos dicen que para evitarle una insolación movieron al priísta de cepa a uno de los extremos donde había un poco de sombra en el patio central del Ágora… pero muy lejos de los reflectores.

Y conforme se acercaba la hora de la cita a la sesión solemne crecía la tensión debido a que, la noche del miércoles, la secta habría tenido un cónclave en el que se habría acordado hacer vacío en la sesión solemne, amago que finalmente solo cumplieron las diputadas Analí Infante y Violeta Cerrillo, quienes junto a los diputados Susana Barragán y Herminio Briones fueron los únicos ausentes en la sesión solemne.

Mal mensaje se habría enviado si en un evento tan importante, en la tierra de los Monreal, en un evento promovido por la coordinadora de la bancada de MORENA, la propia bancada hubiera hecho vacío, pues se hubiera considerado una afrenta directa entre la secta del bienestar y la secta ricardista. Finalmente ésta no se consumó.

Pero el pretendido boicot también tendría su razón de ser. Porque la sesión solemne de este jueves bien puede ser considerado como el espaldarazo a la diputada local Maribel Galván para convertirse en la sucesora de Saúl Monreal en la Presidencia Municipal de Fresnillo, un espaldarazo en el que también habrían sido cómplices los diputados del «bloque plural ampliado».

Originalmente, en el Orden del Día acordado en la Junta de Coordinación Política (JUCOPO) que hoy preside otro fresnillense, el diputado Enrique Laviada, se había contemplado un mensaje del diputado José Juan Estrada como presidente de la Mesa Directiva y como representante del Poder Legislativo.

Sin embargo, en un acto de «cortesía política» (y de complicidad y común acuerdo con el «bloque plural ampliado»), el diputado migrante cedió el uso de la voz a la diputada Maribel Galván para ofrecer el citado mensaje. Incluso cedió su lugar en la presidencia de la Mesa Directiva hacia el final de la sesión, precisamente durante los puntos torales para hacer la declaratoria de Fresnillo como «Ciudad Histórica».

Y aunque al término del acto solemne se habría extendido la invitación a una modesta comida que incluía como postre unas deliciosas paletas de ate de membrillo, únicamente atendieron la cortesía los diputados del «bloque plural ampliado», pues la bancada oficial le hizo el vacío a su coordinadora de bancada y hasta se perdieron del espectáculo que ofrecieron diversos estudiantes con cantos y bailables típicos cual si fuera festival de fin de cursos y en cualquier momento uno esperaba que bailaran «El ratón vaquero».

Finalmente, entre los asistentes a la sesión solemne, no fueron pocas las voces que repetían «¡Maribel, presidenta!» y a cada mención de su nombre se desvivían en aplausos. Porque en el fondo, como se dijo de boca en boca en el Ágora: «es tiempo de las mujeres».

Una cosa quedó muy clara en el evento de este jueves: Maribel Galván se ha ganado el afecto de los fresnillenses no solo por su carisma. Su capacidad, su liderazgo, su experiencia, su habilidad para el diálogo y el acuerdo con la «oposición», así como su incansable labor como gestora, le han permitido abrirse camino en la vida pública de Zacatecas a pesar de la secta.

Y aunque desde hace tiempo se perfilaba a Martín Álvarez Casio como el «candidato natural» a la Presidencia Municipal de Fresnillo, lo de ayer dio un giro en el escenario político para El Mineral. ¿Será que, ahora sí, ya es tiempo de las mujeres?

Fresnillo, más que una nota roja

Para variar, la sesión solemne empezó con retraso de casi 30 minutos y en esta ocasión no se debió a la falta de quórum entre los diputados locales, sino a que el gobernador David Monreal aún no llegaba al recinto.

El protocolo incluyó los mensajes de los representantes del Poder Legislativo, Judicial y Ejecutivo, así como la firma del decreto correspondiente a la declaratoria de Fresnillo como «Ciudad Histórica».

Fue el magistrado Arturo Nahle, presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Zacatecas (TSJEZ), quien con su mensaje ofreció una cátedra sobre la historia de Fresnillo, con todos los elementos que justificaban el nombramiento y rematando: «sobran razones para esta solemne declaratoria de este añejo Mineral como Ciudad Histórica«.

Más político fue el alcalde Saúl Monreal, quien reconociendo la importancia de Fresnillo por su contribución a la historia, la cultura y tradiciones, y la economía local y nacional, entre líneas dio el espaldarazo a la diputada Maribel Galván como su (posible) futura sucesora en la Presidencia Municipal y a quien reconoció por el esfuerzo para materializar esta declaratoria cuyo decreto se había publicado desde el 2018, pero desde entonces quedaba pendiente la sesión solemne para hacerlo de manera oficial.

Su mensaje político fue más allá. Tras agradecer a todas las fracciones parlamentarias por este respaldo, expresó que «Fresnillo es la unidad y lo debemos resaltar, qué bueno que Fresnillo forma parte de este marco de unidad no nada más con el Poder Legislativo, sino entre Poderes«.

Finalmente, la diputada Maribel Galván ofreció el mensaje que tanto esperaban los fresnillenses, donde no solo resaltó el hecho de ser «cuna de grandes hombres y mujeres extraordinarias mujeres«.

Sin entrar en controversias con los medios de comunicación como ha ocurrido con el «gobierno de la transformación» y con una reciente campaña denominada «Todos somos Zacatecas», la diputada aseguró que «Fresnillo es más que una nota roja«, pues aunque reconoció «las adversidades que hemos tenido que transitar, con la sangre chichimeca que corre por nuestras venas aquí estamos dispuestos a luchar por lo que más amamos: nuestras familias, nuestra tierra, nuestra gente«.

Y evocando las diversas aportaciones culturales, históricas y económicas de El Mineral, Maribel Galván remató su discurso con una frase contundente: «en Fresnillo somos familia, la gran familia fresnillense, y que no nos toquen a uno o a una porque nos tocan a todos«.

¿Será Maribel Galván la ideal sucesora de Saúl Monreal en la Presidencia Municipal de Fresnillo?

*Debido a que el lunes es día inhábil, nos leemos hasta el martes. ¡Feliz puente!