Si en días pasados aún había esperanzas de reivindicarse, la noche de este miércoles abundaron las caras largas en el PRI una vez que su dirigente nacional, Alito Moreno, expresó su respaldo a Xóchitl Gálvez para presidir lo que han denominado Frente Amplio por México (y que tiene más logos que un auto de la F1).
De acuerdo con los resultados del segundo sondeo de opinión realizados por Reforma y Wise, dados a conocer por el comité organizador del FAM, Xóchitl Gálvez tendría una ventaja promedio del 57.8% de las preferencias, mientras Beatriz Paredes alcanzaría un 42.42 por ciento.
Esta ventaja fue reconocida anoche por Paredes Rangel, quien dejó en claro que una vez culminado este proceso no aspira a una candidatura en las próximas elecciones, desmintiendo que hubiera alguna negociación: «yo nunca he negociado en lo oscurito, lo oscurito me gusta para observar las estrellas y para querer a las personas que amo, es para lo único que me gusta la oscuridad«.
Sin embargo, entre líneas también lanzó una advertencia velada para el FAM en la siguiente etapa rumbo al proceso electoral del próximo año, al insistir en que a este Frente aún le falta para construirse como alternativa democrática en el 2024, en una tarea que deberá darse «con toda transparencia, ajena a toda suspicacia, tanto en la selección de todas las candidaturas, como en la definición de sus directrices programáticas«.
Y remató: «Los intereses superiores de México son los que deben prevalecer para que realmente el Frente sea una opción para las mayorías ciudadanas y para los partidos que la integran. Realmente, las fuerzas políticas y los liderazgos ciudadanos deben ser los que los conduzcan e integren, no los poderes fácticos«.
Porque los pasados procesos electorales han demostrado que Alito Moreno es bueno para imponer… y para perder. Por eso no es gratuito que Beatriz Paredes contara con el respaldo de quienes ya no coinciden con la política emprendida por su dirigente nacional, mucho menos cuando hay intereses externos de por medio.
Lo importante es que la jornada que se realizaría este domingo 3 de septiembre para elegir la presidencia del FAM fue cancelada, al declararse a Xóchitl Gálvez como candidata única, que no es lo mismo que una candidatura de unidad.
Del otro lado las cosas no pintan distinto. Ya en su momento el dirigente nacional de MORENA, Mario Delgado, tuvo que salir a ofrecer una disculpa por el cochinero en la primera etapa de encuestas rumbo a la elección de lo que han denominado «Comités por la Defensa de la 4T» (o algo así), en un proceso interno que no ha estado exento de cuestionamientos como los vertidos por «corcholatas» como Marcelo Ebrard o Ricardo Monreal, aunque este último parece ya más resignado a sobrevivir la siguiente etapa nadando de a muertito.
¿Qué escenario pinta para el próximo proceso electoral? Una contienda entre dos mujeres, Xóchitl Gálvez y Claudia Sheinbaum, y tal vez un tercero en discordia en la figura de Marcelo Ebrard.
Lo esencial y que no debe perderse de vista es que, independientemente de quién llegue a la candidatura presidencial y luego a la silla de Palacio Nacional, este sexenio con Andrés Manuel López Obrador tuvo sus riesgos con una mayoría relativa en el Congreso de la Unión, que debería fungir como contrapeso entre poderes, más que tapete del Ejecutivo. La próxima Presidencia, entonces, debería contar con contrapesos en el Legislativo, a menos que nos guste la mala vida.
De ahí la importancia de verificar con lupa los cartuchos quemados que circulan en las diversas encuestas del día a día (y eso que todavía no comienza formalmente el proceso electoral 2023-2024) como posibles aspirantes a una candidatura para diversos cargos de elección popular, desde las senadurías, diputaciones y ayuntamientos.
Lo que queda claro es que, a estas alturas, todos los nombres que han participado en procesos internos, sean del color que sean, ya cargan con un desgaste natural de un proceso anticipado. Y apenas es la antesala. ¿En qué condiciones podrían llegar a la contienda de verdad?
Y que comience la fiesta
En la tierra del «es pura percepción», y un día después de conmemorar el Día Internacional de las Víctimas de Desaparición Forzada, este día comienza la máxima fiesta de los zacatecanos con la coronación de Isabel como reina de la Feria Nacional de Zacatecas (FENAZA) y el concierto inaugural de Pablo Montero.
Lo que antaño fuera una temporada de mucha algarabía hoy arranca con un acumulado de 85 homicidios dolosos a un día de que concluya el mes de agosto, una cifra mayor a los 71 homicidios registrados en agosto del año pasado, y muy por encima de los 39 casos registrados en julio de este año.
Pero como a la «nueva gobernanza» no le dan mucha tristeza los datos oficiales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, dicen que ya se ha preparado sendo operativo para cuidar a las familias zacatecanas que decidan ir a las instalaciones de la feria a disfrutar (si su bolsillo lo permite) del programa preparado para su entretenimiento.
Quién sabe si se desplegará un operativo tan fuerte como el implementado para desalojar a los manifestantes de la Fiscalía que exigen un incremento salarial (y se especula que ya existe orden de aprehensión contra su líder, Alejandro Rivera Nieto), y a quienes se atribuye la bolita de no estar en condiciones de pagar la segunda quincena de agosto por la toma de instalaciones.
En fin, que serán casi tres semanas de feria y ya se verá si continúan los abusos denunciados en la edición 2022, con eso de que Jeu Moches fue destituido y ya no interviene (dicen) en la asignación de espacios…
En contraparte, a ver si alguien (¿la SEZAC, por ejemplo?) le echa la mano a los comerciantes fuera del recinto ferial, porque la algarabía, los clientes y el efectivo no circulan igual en esta temporada. Y con eso del cierre de negocios un día sí y otro también, a la «nueva gobernanza» le urge voltear al sector que más genera empleos en la entidad. ¡Ánimas! ¡Ya casi es viernes!