2 años de inseguridad, malestar y retroceso

Corre el plazo de la normatividad electoral y desde el pasado viernes 1 de septiembre, el gobernador David Monreal comenzó con la promoción de su imagen (y presuntos logros) rumbo a lo que será el segundo informe de gobierno, este viernes 8 de septiembre.

No crea que es cinismo, que sí lo es, pero la Constitución le obliga a rendir un informe anual de labores, haiga sido como haiga sido, y haya hecho lo que haya hecho (o dejado de hacer).

Parece que fue ayer cuando Monreal Ávila acudió al recinto legislativo a presentar su primer informe, en una sesión donde el diputado Ernesto González Romo se separó de la bancada de MORENA para poder presentar como «independiente» su posicionamiento en tribuna y, entre porra y porra, jalarle las orejas como habría hecho el senador Ricardo Monreal.

Su siguiente visita al recinto legislativo será en condiciones más o menos similares, pues ya en días pasados nuestros diputados locales revivieron el llamado «PRIMOR» para repartirse la presidencia de la Junta de Coordinación Política (JUCOPO), de la Mesa Directiva del próximo periodo ordinario del último año constitucional, así como del Órgano de Administración y Finanzas.

Nada para el PT (después de los escándalos en la gestión de Ana Luisa del Muro), nada para el PAN (luego de la vulgar rebatinga de Lupe Correa y Karla Valdez), nada para el PRD (¿cómo se atreverían a dejarle algo a Enrique Laviada?), Nueva Alianza o el Partido Verde. Haga de cuenta como los procesos internos del oficialismo y la oposición desde eso que llaman «Cuarta Transformación» y «Frente Amplio por México».

Así que el escenario de este viernes también es previsible, sobre todo considerando la pobre campaña promocional del segundo informe de gobierno, muy a la altura del sexenio: carente de sustancia, guanga y alejada de lo que perciben los zacatecanos en su día a día.

En esta danza de «otros datos», el gobernador David Monreal ya ha destacado logros (eso dice él) en materia de seguridad, infraestructura carretera y campo, enmarcados en una campaña cuyo lema promocional es «2 años construyendo paz, bienestar y progreso«, a pesar de que en la calle se sienten más como dos años de inseguridad, malestar y retroceso.

Desde el primer día de campaña promocional sobraron las críticas luego de que, entre sus resultados, informara de la inversión en la construcción del nuevo C5i (Centro de Control, Comando, Comunicación, Cómputo y Calidad, o algo así), a pesar de que esta inversión no pasó de la colocación de la primera piedra, pues en la congeladora legislativa sigue la petición del Ejecutivo para aprobar la donación del inmueble en favor del Gobierno del Estado de Zacatecas.

Sí: el megaproyecto en materia de seguridad arrancó sin certeza jurídica, pero recordemos que esta administración también comenzó sin plan de prevención del delito, como todo en esta administración, y luego de los cacareados foros de nombre larguísimo, seguimos sin ver claro sobre el dichoso «plan de prevención social de la violencia y la delincuencia con participación ciudadana» (o algo así).

En esta danza de «otros datos» no podía faltar el comparativo con otras administraciones. Porque en materia de infraestructura carretera, David Monreal recuerda que «en los últimos tres sexenios nuestras carreteras estuvieron en el abandono». Tan abandonadas como las tiene hoy la «nueva gobernanza».

Baste recordar algunas intervenciones durante la comparecencia del secretario de Obras Públicas, Guillermo Carrillo Pasillas, como aquella del diputado José Luis Figueroa donde cuestionó por qué las obras carreteras se concentraban en Fresnillo y la disparidad entre los costos por kilómetro lineal, pues había casos donde cada kilómetro se cotizaba hasta en 4 millones de pesos.

Fue la misma comparecencia en la que la diputada Cuquita Ávalos preguntó para cuándo diremos los zacatecanos «la carretera que inauguró López Obrador«. Porque más allá del recurso extraordinario por el registro de vehículos de procedencia extranjera, en el presupuesto federal no se ha etiquetado recurso para alguna obra carretera de alto impacto en la entidad. Y ya van dos años de gobierno.

Para medir el rezago no hay que ir tan lejos. Ya en marzo de este año, meses después de la glosa del primer informe de gobierno, el mismo diputado José Luis Figueroa seguía preguntando por qué las obras del programa de rescate carretero se concentraban sólo en seis municipios y la mayor inversión se destinaba específicamente a Fresnillo, aunado a los visos de opacidad en los contratos y el seguimiento de obras.

Y si hablamos de transparencia, pues en la «nueva gobernanza» se han visto lentos en eso de la transparencia proactiva para mostrar con claridad el dichoso «kilometrómetro» (que después rebautizaron como «carreterómetro«).

Eso sí, este fin de semana, al acudir a los informes de los alcaldes de Villanueva, Rogelio González, y Tabasco, Gilberto Martínez, David Monreal no dejó de presumir su plan de rescate carretero y hasta anunció que por cada peso que inviertan los municipios, el estado aportará dos pesos. ¡Qué alivio!

En la burbuja de la «nueva gobernanza», «el campo es solución y no problema» y hasta pretenden reforzar la imagen de un gobernador que viene del campo para generar simpatías entre los zacatecanos, pero el campo no olvida que este gobierno no contrató seguros catastróficos y los pocos apoyos que han llegado, además de la selección arbitraria de beneficiarios, han caído como las lluvias en Zacatecas: tardías y a cuentagotas.

Porque si entre los resultados de este segundo informe destaca que se ha apoyado a 8 mil campesinos, ya nada más le faltan como 136 mil productores para que se sienta el apoyo de verdad.

Mientras tanto, «al pueblo, pan y circo» con la edición 2023 de la Feria Nacional de Zacatecas, donde el gobernador inauguró también la Expo Agrícola y Ganadera en la que anunció apoyos de 25 mil pesos para la adquisición de sementales con los cuales se beneficiará a 400 productores. Y que no falten los tractores a sobrecosto. ¡Qué bonito!

Todo ha de marchar tan requetebien en la burbuja de la «nueva gobernanza» que el gobernador David Monreal hasta tuvo tiempo de acudir al quinto informe del presidente Andrés Manuel López Obrador y de paso, al primer informe del gobernador de Durango, Esteban Villegas.

Usted, estimado lector, siéntese y ármese de paciencia, porque a esta campaña de los «2 años construyendo paz, bienestar y progreso» le restan dos semanas de promoción. ¡Y que viva Zacatecas!