Como ya es usual, a partir del 31 de octubre estará disponible en la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT) la información correspondiente al tercer trimestre de este año de todos los sujetos obligados.
O al menos a ello están obligados por ley, porque no en pocos casos hay retraso en la carga de información e incluso la renuencia a publicar la información a tal grado que el pleno del Instituto Zacatecano de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (IZAI) ha tenido que imponer sanciones a quienes se niegan al escrutinio público mediante el derecho de acceso a la información.
Con la reserva de actualizar la información con corte al 30 de septiembre, por lo pronto se detectan algunas inconsistencias en lo relativo a la información financiera de algunos ayuntamientos, y destacan en particular por la reciente evaluación del IZAI respecto a la información financiera actualizada para todos los sujetos obligados.
Porque entre lo que reportan los municipios y lo que señala la Secretaría de Finanzas en sus correspondientes informes financieros y de avance de gestión hay cifras que no cuadran, por montos que tampoco pasan desapercibidos, pues implican varios millones de pesos.
Pero pongamos el ejemplo de sólo cuatro municipios para explicar a qué nos referimos: Zacatecas, Guadalupe, Fresnillo y Jerez. Porque, de inicio, lo que revelan sus informes financieros es que en el primer semestre del año el municipio de Guadalupe superó en recaudación de ingresos propios al Mineral.
En el primer semestre de este año, el municipio de Guadalupe recaudó unos 181 millones 254 mil 437.69 pesos en ingresos propios (impuestos, derechos, multas, aprovechamientos, etc.) contra los 155 millones 748 mil 383.35 pesos recaudados por el Ayuntamiento de Fresnillo en el mismo periodo y por los mismos conceptos. Es decir, una diferencia de hasta 25.5 millones de pesos, y eso que Fresnillo es el municipio más poblado del estado.
Sin embargo, en lo relativo a las transferencias por participaciones, aportaciones y convenios de colaboración, se aprecian sendas diferencias que llaman la atención respecto a lo que reporta la SEFIN en sus informes financieros y de avances de gestión.
Por ejemplo, mientras el municipio de Guadalupe reporta que tuvo transferencias por dichos conceptos por 359 millones 740 mil 610.31 pesos durante el primer semestre del año, la SEFIN reporta transferencias al municipio por 369 millones 391 mil 77 pesos, lo que implica una diferencia de 9 millones 650 mil 466.69 pesos. ¿Dónde quedó ese dinero?
Más grave es el caso de Fresnillo, pues en el primer semestre del año el municipio reportó transferencias por participaciones, aportaciones y convenios de colaboración por 455 millones 915 mil 782.18 pesos, mientras la SEFIN reportó transferencias al municipio por 471 millones 487 mil 825 pesos. Es decir, una diferencia de 15 millones 572 mil 42.82 pesos. ¿Cuál cifra es la correcta y quién está mintiendo en sus informes financieros?
En una situación similar se encuentra el municipio de Jerez, pues en los primeros seis meses del año reportaron ingresos por transferencias hasta por 134 millones 978 mil 888.57 pesos, mientras la SEFIN daba cuenta de transferencias al municipio por 139 millones 9 mil 874 pesos, lo que implicaría una diferencia de 4 millones 30 mil 985.43 pesos. ¿A dónde se fue ese recurso?
Menos grave parece la situación de la Capital, que en el primer semestre del año reporta ingresos por transferencias por 290 millones 466 mil 579.10 pesos, mientras la SEFIN señala en sus informes financieros y de avances de gestión transferencias al municipio hasta por 289 millones 350 mil 320 pesos, lo que significa una diferencia de apenas 1 millón 116 mil 259.10 pesos.
Probablemente las diferencias detectadas al menos en el caso de estos cuatro municipios (todos gobernados por MORENA o partidos aliados) se deban a procesos administrativos que implican un desfase en sus informes financieros; sin embargo, no dejan de llamar la atención los montos por los que no cuadran los citados informes.
Tampoco pasa desapercibido que ya desde el 30 de junio, el municipio de Guadalupe mostraba déficit en algunas partidas, especialmente en el Capítulo 1000, además de subejercicios en otras partidas y la asignación tardía de recursos para convenir.
Por el contrario, según lo que muestran los informes financieros, la Capital parece mostrar un ejercicio de recursos más responsable, acorde con lo presupuestado y atendiendo a la Ley de Ingresos estimada.
Finalmente, al menos en los primeros seis meses del año no se aprecia un impacto negativo serio a las transferencias a municipios, luego de los recortes aplicados por la Federación que mucho se han comentado, una señal de que en la SEFIN que encabeza Ricardo Olivares ha habido voluntad para no desproteger a los municipios en sus finanzas.
Tomando estos antecedentes en consideración, ya se verá si los diputados locales realizan un análisis serio y a profundidad respecto a los proyectos de presupuesto para el 2024 que presenten los municipios en los próximos meses, pues no se olvida la discusión particularmente para el Ayuntamiento de Guadalupe y el incremento en diversos conceptos recaudatorios que hoy lo colocan como el municipio con mayor recaudación propia en el estado. ¿A qué costo?