Un día antes del cierre de registros para candidaturas federales (el 22 de febrero), el Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) celebró sesión extraordinaria el pasado 21 de febrero para aprobar las modificaciones solicitadas para las fórmulas de senadurías y diputaciones federales en las coaliciones «Sigamos robando más» (o algo así) y «Fuerza, corazón, tripas y lengua» (o algo así).
Del anteproyecto presentado por la Comisión de Prerrogativas y Partidos Políticos se desconoce el contenido, pues en el repositorio documental del INE aún no se transparenta dicha información.
SIn embargo, por la versión estenográfica de la sesión correspondiente (de carácter privado), se sabe que en el caso de la coalición MORENA-PT-PVEM, dichas modificaciones consistieron en el retiro de 12 fórmulas de senadurías de mayoría relativa, quedando en 40 posiciones donde van coaligados y de las cuales también habría reajustes en 17 casos en el siglado.
Respecto a las diputaciones federales, se habrían retirado 23 fórmulas y se habrían incorporado 28 distritos electorales, para dar un total de 260 fórmulas coaligadas, de las cuales en 111 se reajustó el siglado.
¿Dónde hubo cambios?, ¿en qué entidades y distritos electorales? Eso se sabrá cuando el INE publique el contenido del Acuerdo correspondiente, o cuando se apruebe la totalidad de registros presentados por los partidos políticos y coaliciones, a más tardar el 29 de febrero (o sea, este jueves), lo primero que ocurra.
Del tema ya habíamos advertido en este espacio en su oportunidad, y debido a que en la sesión extraordinaria del Consejo General del INE del pasado 21 de febrero no hubo discusión del anteproyecto correspondiente, qué curioso que vencido el plazo del cierre de registros para candidaturas federales no se hayan dado a conocer las modificaciones a los convenios de coalición.
Los siguientes tres días serán de tensión electoral entre MORENA, el Partido del Trabajo y el Partido Verde Ecologista de México, pero también entre los grupos, corrientes, sectas y demás al interior de cada instituto político, como ya se ha visto en el caso de Zacatecas.
Y aunque la pugna se ha centrado entre Soledad Luévano y Verónica Díaz Robles para encabezar la fórmula al Senado por Zacatecas, cuyo desenlace está por verse, la expectativa se mantiene también en el caso de la diputación federal por el Distrito 3 con cabecera en la Capital, pues hasta donde se sabe se habrían registrado Alfredo Femat Bañuelos y Ulises Mejía Haro.
El desaseo en el proceso interno de MORENA (y no citamos más ejemplos porque abundan) surgió cuando el dirigente nacional, Mario Delgado, y la secretaria general, Citlalli Hernández, abieron la puerta a las «mesas de acuerdos» por encima de las dichosas encuestas, único método que (pagado o no) había dado cierta estabilidad y credibilidad al movimiento.
Las consecuencias ya vendrán con la posibilidad de una ola de impugnaciones a la asignación de candidaturas federales, que bien podría aterrizar en las postulaciones locales, vayan o no en coalición. Y eso significa esperar los tiempos de los tribunales electorales, que podrían resolver los casos ya iniciado el periodo de campañas que oficialmente arrancarán este viernes 1 de marzo.
Y a propósito del arranque de campañas, la presidenciable Claudia Sheinbaum ya dio a conocer que la cita será en el Zócalo de la CDMX a partir de las 16:00 horas. Del otro lado, la candidata Xóchitl Gálvez no ha confirmado la cita para su arranque de campaña, aunque el diputado federal Miguel Torres anunció que sería en el municipio de Fresnillo, que encabeza la lista de ciudades con mayor percepción de inseguridad en el país.
De confirmarse las palabras del perredista Miguel Torres, que no haya dudas de que Zacatecas será la base de la campaña de la oposición, poniendo a nuestro estado como ejemplo de los malos gobiernos de la 4T. A ver si esto no deriva en xenofobia contra los zacatecanos…
Del otro presidenciable, Jorge Álvarez Máynez, na, na, na, na, na-da se sabe sobre su arranque de campaña. Esperemos que no siga ahogado en alcohol.
Pero volvamos a la sesión extraordinaria del Consejo General del INE, pues el 21 de febrero los consejeros electorales también aprobaron la solicitud de modificaciones al convenio de coalición entre el PRI, PAN y PRD, que básicamente consiste en la postulación de 60 fórmulas de candidaturas a senadurías por el principio de mayoría relativa; y aumentan de 253 a 294 las fórmulas para diputaciones federales por el mismo principio.
Cerrado el registro de candidaturas ante el INE el pasado 22 de febrero, y con el secretismo de las modificaciones en los convenios de coalición, la Dirección Ejecutiva de Prerrogativas y Partidos Políticas tuvieron tres días para la revisión de cada expediente de los aspirantes postulados.
Y en esta etapa aún podría haber cambios, pues como se recordará, en otros procesos electorales hubo aspirantes que se quedaron en el camino por no presentar sus informes de gastos de precampaña.
Concluido todo este proceso, el Consejo General del INE sesionará el 29 de febrero para aprobar los nombres de las personas candidatas que cumplieron con todos los requisitos y hasta entonces, no antes, se sabrá quiénes serán los candidatos definitivos que podrán iniciar campaña el 1 de marzo… a menos que se cumpla el amago de las impugnaciones.
En medio de todo esto, ¿ya informó el gobernador (eso dice él) David Monreal ya informó de qué manera cumplirá con su «Agenda de la Paz» y el compromiso de garantizar «elecciones en paz» en el Año de la Paz?