Tiro por viaje, el INEGI demuestra con datos duros que la bonanza prometida por la «nueva gobernanza» está muy lejos se convertirse en realidad, más porque los dichosos «ejes tractores» (ya olvidados en el discurso oficial) no se ve para cuándo vayan a arrancar.
Si a los indicadores de la actividad industrial, del sector de la construcción, del empleo formal o de la informalidad laboral le sumamos las estadísticas de Inversión Extranjera Directa, no es un panorama muy alentador para Zacatecas, que hoy sigue teniendo a dos de sus principales municipios entre las ciudades con mayor percepción de inseguridad.
Hace unos días, la Secretaría de Economía federal dio a conocer la estadística de IED al primer trimestre de este año, y para no variar, Zacatecas no sale bien librado, al registrar desinversión por 11.4 millones de dólares. De la poca inversión registrada, 1.4 millones de dólares apenas fueron reinversión de utilidades, pero con una merma de 12.9 millones de dólares menos en lo correspondiente a las cuentas entre compañías. De nuevas inversiones, ni hablar, ni siquiera alcanzaron una décima.
Con estos antecedentes, no se entiende por qué obstaculizar el desarrollo de la Reunión Internacional de Minería Zacatecas 2024, en un esfuerzo de la iniciativa privada por abrir el mercado de la industria minerometalúrgica para dinamizar la economía.
Porque esta reunión, que se realizará del 19 al 21 de junio con actividades en el Palacio de Convenciones y en el IPN, ha encontrado obstáculos que explican por qué las fallas en la atracción de inversiones, que a la fecha únicamente se han traducido en muy bonitas cartas de intención para invertir, pero sin concretar acuerdos.
Y es que todo parece indicar que no existe coordinación entre la Secretaría de Economía (SEZAC) y la Secretaría de Turismo (SECTURZ) para llevar a cabo este magno evento (porque sus titulares estuvieron muy prestos para la foto), pues este fin de semana fue recurrente la queja de quienes pretenden asistir a las actividades (y que para ello deben preparar el montaje de sus stands), pero les ha sido negada la entrada al Palacio de Convenciones con todo y camiones con asistentes.
Si de por sí hay dificultades para promover a Zacatecas Deslumbrante como destino turístico, no se entiende por qué ahuyentar el turismo que llega en el segmento de Congresos y Convenciones (que deja derrama y bien) con una mala coordinación entre dependencias.
Por si fuera poco, la queja ante la logística de este evento es que tampoco parece haber coordinación con las corporaciones de seguridad, mucho menos con las de Tránsito y Vialidad para coadyuvar al correcto desarrollo de las actividades preparatorias.
Ante este escenario, los quejosos no dudan en señalar como principal responsable de los obstáculos a Cristina Martínez Zapata, jefa de Operación y Logística de la Subsecretaría de Promoción Turística de la SECTURZ, a quien exigen que dé la cara y atienda los reclamos de los asistentes, a quienes se les han negado las facilidades para asistir y participar en el RIM 2024.
No quisiéramos pensar que desde la administración del Palacio de Convenciones buscar cobrar también por el uso del estacionamiento para los asistentes al magno evento que está en puerta, desalentando la participación de quienes ya han llegado a Zacatecas sólo para desencantarse con el mal trato de las autoridades.
Inhabilitada, pero ya es consejera
El pasado 30 de mayo, diputados locales eligieron por mayoría a dos nuevos integrantes del Consejo Consultivo de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Zacatecas (CDHEZ), luego de tres convocatorias fallidas por intereses políticos de nuestros legisladores.
Se pensaba que con la toma de protesta el pasado 6 de junio al menos ya se había avanzado en la designación de dos de los seis integrantes que faltaban del citado Consejo Consultivo, y muy prestos, también aprobaron el pasado 11 de junio una cuarta convocatoria para renovar los cuatro espacios restantes con los perfiles que ya se habían inscrito en las convocatorias anteriores.
Sin embargo, como no están en lo que deben estar, tendrán que modificar la convocatoria vigente o emitir una nueva debido al error en el que incurrieron al designar a Sonia González de Luna como integrante del Consejo Consultivo de la CDHEZ.
Porque resulta que la exdirectora del Instituto de la Mujer Zacatecana de la Capital tiene una sanción vigente, con una sentencia de inhabilitación que va del 8 de junio de 2022 al 12 de diciembre de 2046, por acumulación de periodos en 36 expedientes (y que suenan mucho a algo que haría el Ángel de la Muerte cuando se desempeñó en la Secretaría de la Función Pública).
Si bien se interpusieron 34 juicios de nulidad (correspondientes al número de expedientes de inhabilitación) y un juicio adicional de nulidad en contra de la acumulación de sanciones (cada una por un periodo de 8 meses y 18 días), el Tribunal de Justicia Administrativa aún no dicta una sentencia definitiva al juicio de nulidad TJA/554/2022-II, por lo que las sanciones de inhabilitación siguen vigentes.
Ese pequeño detalle no fue observado por nuestros diputados locales, que entrampados en sus negociaciones omitieron revisar si las personas postulantes estaban o no inhabilitadas o en proceso de inhabilitación.
Haiga sido como haiga sido, este antecedente debería tener consecuencias, pues de otro modo qué garantías se da a la población que ve vulnerados sus derechos humanos si desde el Consejo Consultivo del organismo garante no hay certeza sobre la integridad de sus integrantes.
