Les cierran las puertas

Apenas este lunes la «nueva gobernanza» presumía el liderazgo que mantiene nuestra entidad en la industria minera a nivel nacional, especialmente en producción de plata, oro, plomo y zinc. Casi casi, como si el «robo del siglo» no hubiera acontecido en semanas pasadas y aunque a la fecha no se haya encontrado el material robado con valor estimado en unos 3 millones de dólares.

Tampoco es que desde la secretaría de Economía que dice encabezar Rodrigo Castañeda Miranda se haga mucho por la industria minera: ni para retener las inversiones, ni para facilitar la reinversión de utilidades, ni mucho menos para la atracción de nuevas inversiones.

De hecho, la minería más parece salir sola por sí misma y a pesar de la «nueva gobernanza» y al tomar distancia del gobierno ha mantenido un crecimiento constante a diferencia de otras actividades industriales que siguen no estancadas, sino en el sótano, como la industria manufacturera o de la construcción, con números negativos en gran parte de la actual administración que ya va en su segunda mitad del sexenio.

Pues bien, los problemas no terminan con el hallazgo de nueve góndolas (vacías) de las 11 que fueron robadas a la minera Peñasquito. No, estimado lector. Porque ahí viene un nuevo problema y ese sí puede ser responsabilidad del gobierno.

Actualmente no sólo la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ) ofrece a las empresas mineras la mano de obra especializada con egresados que cuenten con la capacitación que requieren. Más recientemente, entre la nueva oferta educativa tuvo su razón de ser la Unidad Profesional Interdisciplinaria de Ingeniería del Instituto Politécnico Nacional (UPIIZ-IPN) Campus Zacatecas con la apertura de la ingeniería metalúrgica, que se suma a la oferta de mano de obra capacitada para la industria minera en la entidad.

Desde su apertura, han existido convenios de coordinación entre el IPN y dichas empresas mineras a fin de que los estudiantes de la ingeniería metalúrgica realicen sus prácticas profesionales en campo, aunque el convenio de mayor alcance era el suscrito con minera Peñasquito.

Como parte de dicho convenio, el IPN se comprometía a enviar a sus estudiantes cada semestre para que realizaran sus prácticas y a cambio, las empresas mineras ofrecían transporte y alimentación.

Pues bien, a partir de este semestre (que está por concluir) todo indica que la UPIIZ-IPN, que hoy dirige Fernando Flores Mejía, dicho convenio ya no se cumplió y que al menos en Peñasquito han decidido cerrar las puertas a egresados de esta institución educativa.

El problema, señalan, es que cada semestre, y durante todo el semestre, el IPN debía enviar a sus estudiantes a realizar sus prácticas en la mina localizada en Mazapil, pero en esta ocasión no cumplieron con el compromiso y pretendían enviar a sus estudiantes, a todos, al cierre del semestre; es decir, durante el mes de diciembre.

No sólo eso. Como habían incumplido con la primera parte del convenio, ya no habría el beneficio del transporte y alimentación de los estudiantes, así que ahora las familias tendrían que costear esos gastos de su bolsillo, y no es como que los estudiantes del IPN tengan mucha solvencia económica.

Además, por si no fuera suficiente, al interior de la UPIIZ-IPN decidieron modificar en lo oscurito su normatividad a fin de establecer a la de ya estas nuevas disposiciones para que las familias de los estudiantes costeen estos gastos que antes se derivaban de un convenio entre el IPN y las empresas mineras, violando incluso el principio de irretroactividad y ya a punto de concluir el semestre.

Pese a estos cambios, en Peñasquito les dijeron que muchas gracias, pero que ya no querían capacitar a sus estudiantes. Que le buscaran en otras empresas mineras que fueran menos serias. Y así fue, porque ahora sus estudiantes tendrán que tocar puertas en mineras establecidas en otros municipios como Sombrerete, ahí donde arrancaron la semana con senda agresión armada en contra de elementos de la Guardia Nacional, justo en el acceso a la cabecera municipal.

Y aunque no se reportaron lesionados (ni detenidos), a ese escenario se expondrán los estudiantes de Ingeniería Metalúrgica de la UPIIZ-IPN gracias a convenios incumplidos por parte de la actual dirección.

No es como que el secretario de Economía esté en condiciones de andar presumiendo que Zacatecas es lo mejor de lo mejor en materia minera, mucho menos cuando ni siquiera garantiza que existan las condiciones para su desarrollo. Y ahí viene la nueva política federal para prohibir la minería a cielo abierto, como en Peñasquito…