Ya de noche, cuando se hacen cosas buenas que parecen malas, o malas que parecen buenas, diputados locales de la 65 Legislatura publicaron en la Gaceta Parlamentaria el dictamen relativo al Presupuesto de Egresos 2025 y ¿qué cree? Prácticamente, no se le mueve ni una coma a la propuesta presentada desde el pasado 30 de noviembre por el secretario de Finanzas, Ricardo Olivares Sánchez.
El escenario ya se advertía desde aquella comparecencia que no fue comparecencia pero sí fue comparecencia del titular de la SEFIN donde, más allá de responder interrogantes sobre el proyecto de paquete económico, el acto más pareció un mero trámite sin espacio para dudas y réplicas. Como quien dice: planchado desde el inicio.
Así que, siguiendo el proceso legislativo, se espera que en sesión de este lunes citada a las 9 de la mañana (pero que reuna quórum para sesionar cuando los diputados concluyan con sus «actividades propias de su distrito») se dé una segunda lectura, discusión y votación del respectivo dictamen. Y a nuestros diputados de la 65 Legislatura ya sólo les quedarían dos paquetes más de leyes de ingresos municipales por aprobar para dar por concluido este primer periodo ordinario que se fue a tiempo extra.
Pero no fue el único punto de interés en la sesión nocturna de este domingo, pues también por unanimidad fue aprobado un dictamen de la Comisión de Hacienda y Fortalecimiento Municipal que preside el morenista José Luis González Orozco, por el que se autoriza al Ayuntamiento de Guadalupe la donación de un predio al Gobierno del Estado para el proyecto del cacareado C5 (en el que ya ni siquiera incluyen la «i» dizque de «inteligencia»).
¿No se suponía que desde la 64 Legislatura ya había sido autorizada la donación del terreno? Sí y no. Porque como recordará, estimado lector, los exdiputados de la pasada Legislatura se fueron por la libre y poco les importó aprobar por mayoría (con cuatro votos en contra y dos abstenciones) un dictamen para un proyecto viciado desde el inicio y en el que ni siquiera se fijaron en las letras chiquitas.
Sí, estimado lector. Porque como evidenciamos en este espacio en aquel entonces, había una nota a pie de página en la que el propio Ayuntamiento de Guadalupe advertía que había 3 hectáreas de las más de 8.8 que comprende el Cerro San Simón que estaban comprometidas en el Fideicomiso de Administración e Inversión para la Creación de un Fondo para el Desarrollo Económico y Turístico del «Cerro San Simón». Y así se fue el dictamen, la votación y el decreto correspondiente.
Más de un año después de aquella sesión del 16 de noviembre de 2023, el tema regresó a la 65 Legislatura para autorizar la donación de la superficie restante para que el proyecto del Centro Estatal de Comando, Control de Comunicaciones, Cómputo y Coordinación (C5) pudiera continuar, en particular un inmueble con valor catastral por 32 millones 862 mil 692.80 pesos cuya solicitud de donación fue recibida en los últimos días de la 64 Legislatura, pero cuyo trámite concluyó en la actual.
El proyecto ya de por sí ha pecado de irregularidades en cada etapa, desde que el 14 de octubre de 2022 el Ejecutivo estatal remitiera al Ayuntamiento la solicitud de donación, luego la colocación de la primera piedra el 6 de marzo de 2023, cuando hasta el 8 de junio de ese año fue remitida la dichosa solicitud al Poder Legislativo, y hasta anoche 15 de diciembre de 2024 fue autorizada la última (y parece que definitiva) solicitud de donación del área restante.
En resumen: han sido prácticamente dos años de trabajos en la construcción del C5 sin tener la certeza jurídica sobre los terrenos donde se edifica el megaproyecto de la «nueva gobernanza» en materia de seguridad, que según los anexos del Presupuesto de Egresos 2025 concluiría en 2027. Algo así como lo que ocurre con el polémico Viaducto elevado. Y a ver para cuándo…
Elecciones
Fue un fin de semana por demás movidito y con algunas sorpresas. Por una parte, Filiberto Frausto Orozco y Marcelino Rodarte fueron electos como nuevos representantes de las secciones 34 y 58 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), dos perfiles del Movimiento Democrático del Magisterio Zacatecano (MDMZ) y que ya de por sí han abanderado causas ciudadanas como la defensa de jubilados y pensionados del ISSSTEZAC.
Una nueva derrota para la «nueva gobernanza» que «a mitad de camino» las pierde todas, como hubiera perdido en una consulta de revocación de mandato si no hubiera inhibido la participación ciudadana.
Pero, bueno… también fue electo Aldo Peláez (sólo en su casa lo conocen) como nuevo dirigente estatal del PAN gracias al voto de los consejeros, porque si se hubiera abierto la votación a la militancia, otro son le cantaría al partido que acusa dictadura en la 4T.
Lo cierto es que, con esta elección, avanza el varelismo en la suma de posiciones para la eventual renovación de la gubernatura en el 2027. ¿A costa de qué? Ya se verá…
¡Se están peleanda!
¡Y que se rompen las medias en el Congreso de la Unión! Porque para vergüenzas, no llenamos los zacatecanos, ahora el paisano Ricardo Monreal se vio envuelto en una polémica con el senador Adán Augusto López en una guerra de acusaciones que llega precisamente con la aprobación del Presupuesto de Egresos federal 2025, con recorte para el Senado de la República.
El recorte no gustó al de Tabasco, exsecretario de Gobernación, y acusó al de Puebla del Palmar de desvíos millonarios en contratos simulados por la prestación de servicios durante su gestión como senador en la pasada Legislatura.
El tema creció a tal punto que hasta hubo desplegado de por medio, con firmas de dudosa convicción y legalidad, respaldando a Monreal Ávila frente a los ataques de Adán Agusto López, en un pleito donde luego tuvo que intervenir Gerardo Fernández Noroña para que le bajaran tres rayitas y no lavaran los trapos sucios en público.
Bien raro el silencio de las cúpulas de MORENA, especialmente de Luisa Alcalde o del junior Andrés Manuel López Beltrán, cuando el partido se les deshace en las manos y que luego pondrán más difícil eso de lograr 10 millones de afiliados.
Pero el pleito nacional en MORENA no es el único show de estos días, también tenemos el pleito en lo local entre el senador Saúl Monreal y el diputado federal Ulises Mejía Haro. Y todo por ver quién había juntado más gente en sus «asambleas del pueblo» que no fueron otra cosa que posadas navideñas con acarreados.
Ah, pero es que como ya están pensando en la elección del 2027, lo importante en sus cabecitas es ver quién muestra más músculo (que francamente es una práctica falocrática como si se midiera quién tiene la desta más grande).
Ninguno parece estar conectado con lo que hoy duele a los zacatecanos: la crisis de personas desaparecidas y no localizadas, el estancamiento económico (por decir lo menos) de Zacatecas, la pérdida de empleos en lo que va de la «nueva gobernanza», o qué tal la reciente recomendación de la CNDH por la brutalidad policiaca del 8M, o la indignación por el ridículo presupuesto federal para nuestra entidad…
Finalmente, en política hay que aprender a comer mierda sin hacer gestos, y a quienes hoy vemos agarrados del chongo, mañana les veremos de la mano y en campaña. ¿O ya se olvidó cuando David Monreal declinó a la gubernatura por Miguel Alonso Reyes?, ¿ya quedó en el pasado el pleito entre Saúl Monreal y Verónica Díaz, que fueron fórmula en la pasada elección del 2 de junio? En una de esas, capaz que ni siquiera toca hombre en las candidaturas a la gubernatura…