Pandemia redujo migración en 2020

Debido a las condiciones de la pandemia por el COVID-19, hace unos días la Organización de las Naciones Unidas (ONU) estimó que se redujo un 30% la movilidad a nivel mundial, lo que también impactó en los flujos migratorios como en la frontera entre México y Estados Unidos.

José Juan Estrada Hernández, secretario del Zacatecano Migrante (SEZAMI), refirió que de acuerdo con las estadísticas de deportaciones, sí hubo una disminución entre el 2020 en comparación con los registros del 2019.

Refirió que en el 2019 se registraron 5 mil 891 zacatecanos que fueron deportados, mientras el año pasado fueron 4 mil 876 personas, una diferencia de 1 mil 15 deportaciones menos, y aunque la cifra aún es alta (prácticamente 13 personas deportadas por día), durante la administración del presidente Barak Obama se tenían hasta 10 mil deportados por año.

Al respecto, el funcionario expresó que en el 2020 “sí hubo una disminución importante, pero fue porque las personas no pudieron moverse por el tema de la pandemia, no es porque las economías estén mejor y la gente no migre; la mayoría de estas casi 6 mil personas que teníamos en el 2019 son personas que estaban intentando cruzar hacia Estados Unidos y nunca lo lograron”.

También precisó que en este tema la percepción fue más una agenda mediática que una realidad en la administración de Donald Trump, quien había prometido deportaciones masivas, pero no tenía criterios claros y había mucho desorden.

“Cuando Obama fue presidente tuvimos alrededor de 10 mil zacatecanos deportados por año, la gente dice que él era amigo de los migrantes, pero deportaba mucho, a él no le importó; a él le importó tomar medidas económicas extremas para la recuperación económica del país y entre eso entra la parte de desocupar y deportar para que los espacios fueran ocupados por los locales”.

En cambio, Estrada Hernández explicó que Donald Trump “prometía a sus grupos que lo apoyaban que iba a hacer deportaciones masivas, sabíamos que eso era poco probable porque no depende de él, a menos que hubiera una crisis económica importante y a él le tocó las partes buenas de la recuperación económica, como consecuencia de las medidas drásticas que tomó Barak Obama en su periodo anterior”.

Además, recordó que en Estados Unidos el 80% de los migrantes zacatecanos tiene más de 20 años viviendo en aquel país y cuenta con sus documentos en regla, por lo que era poco probable que se registraran deportaciones al interior; la mayoría de las deportaciones recientes se trata de personas que intentaban cruzar la frontera.

“La gente que tiene 20, 30 o 40 años viviendo en Estados Unidos es poco probable que sea deportada, estos números son más bien de la gente que está intentando cruzar; también hay una lista de personas que han cometido un delito grave y entonces ya tienen una orden de deportación, pero una persona que no ha cometido ninguna violación es poco probable que sea deportada del interior del país y más cuando tienen mucho tiempo viviendo ahí”.

Repatriación de cadáveres

A propósito de la pandemia, José Juan Estrada Hernández indicó que ha habido dificultades en el traslado de cuerpos de zacatecanos que murieron por COVID-19 en Estados Unidos debido a la ausencia de una legislación federal y a que no se han homologado criterios entre los estados por los que debe cruzar un cuerpo.

Comentó que aunque se trató de un tema emergente, las instancias involucradas en materia de salud y migración del nivel federal y estatal no reglamentaron ni unificaron criterios para hacer estos traslados.

Sin embargo, a pesar de estas dificultades, el trabajo ha continuado. A la fecha se tiene un reporte de 114 cuerpos de zacatecanos que han sido repatriados, pero son los reportes de la Cancillería que se limitan a quienes solicitan de su apoyo para este trámite.

El titular de la SEZAMI recordó que el 80% de los zacatecanos en Estados Unidos está regularizado y no solicita el apoyo del Consulado, por lo que el número podría ser mayor.

“Cada caso ha sido diferente, pero creemos que todos los mexicanos tienen derecho a que su gobierno los defienda y no solamente eso, sino que les den las facilidades para que puedan regresar los restos de sus seres queridos a su tierra”.