Con el fin de salvaguardar el bienestar de la comunidad universitaria y evitar el aumento en las cifras de personas contagiadas, el Consejo Universitario en sesión permanente determinó dar continuidad a las actividades académicas a través de la impartición de las clases virtuales a los más de 40 mil jóvenes que conforman la matrícula estudiantil.
El rector de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), Rubén de Jesús Ibarra Reyes, resaltó dos aspectos que se necesitan analizar para determinar el regreso a clases presenciales. El primero es valorar el efecto positivo que presenten las personas vacunadas de 18 años en adelante y que cuenten con su segunda dosis, además de revisar cómo se comporta el semáforo epidemiológico estatal.
Al respecto, destacó la importancia de analizar la información diaria para tomar decisiones que guarden el bienestar de los universitarios, sobre todo los que en estos días se encuentran generando anticuerpos.
El segundo punto a considerar es esperar los resultados a la reacción del regreso a clases presenciales de algunas instituciones de nivel básico, como en nivel de primaria y secundaria, y de ahí tomarlos como referencia para establecer la modalidad de las clases en la Universidad.
El rector refirió que instituciones como la Universidad Autónoma de Aguascalientes (UAA) han optado por tener un método híbrido para llevar a cabo el semestre, tomando como medida precautoria la realización de pruebas semanales a la comunidad universitaria, acción que la UAZ no podría solventar.
Por su parte, el coordinador de Evaluación e Información Institucional, Manuel Rivera Escobedo, informó que se trabaja en la creación de una aplicación para determinar zonas de alto riesgo de contagios en la UAZ, regulando el ingreso a los espacios universitarios.
Entre los acuerdos a los que llegaron los integrantes del Consejo Universitario están dar continuidad a las actividades académicas con las clases virtuales y esperar las condiciones para abrir las aulas, así como el funcionamiento de los comedores y casas de estudiantes y contar con un método para garantizar la movilidad estudiantil.
Además, las autoridades coincidieron en que se ocupa realizar encuestas a los universitarios para obtener datos reales del comportamiento del contagio, acción para la que se necesita la sensibilización y compromiso de la comunidad universitaria para tener clara la situación que se vive en el interior de la institución.
