No importa la encuesta de la que se trate. Hoy David Monreal sigue en el sótano de los mandatarios, calificado como el peor gobernador del país, con niveles mínimos (casi inexistentes) de aceptación entre sus gobernados. Pero claro: “solo es percepción”.
En su última conferencia para presumir “cifras alegres” en materia de seguridad, el gobernador no dejó pasar la oportunidad para seguir insistiendo en que los medios de comunicación son “promotores de grupos de la delincuencia”. Pero sus “cifras alegres” no quedaron sin respuesta.
El pasado 19 de abril, el INEGI dio cuenta de que Fresnillo y Zacatecas se ubicaron entre las cinco ciudades con mayor percepción de inseguridad en el país, resultados que el propio gobernador desestimó al calificarlos como “simple percepción” e insistir en una realidad que demuestra la burbuja en la que vive.
Al día siguiente, el 20 de abril, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública dio a conocer la estadística de incidencia delictiva al mes de marzo y, como era de esperarse, en Zacatecas hubo un aumento significativo (superior al 50%) en el número de homicidios dolosos respecto al mes de febrero.
Las cuentas del horror continúan con el homicidio de policías estatales y municipales y la cuenta ya va en 21 elementos en lo que va del año en Zacatecas, marcando el año más sangriento para efectivos de corporaciones policiacas. Y las fichas de búsqueda de personas desaparecidas siguen en aumento día tras día, mientras los homicidios no han cesado incluso durante el Festival Cultural. Pero dice el gobernador que “solo es percepción”.
Vaya nivel de asesores, que en lugar de ayudarle a replantear la estrategia de seguridad (si es que la hay), continúa con el hostigamiento a policías estatales que exigen condiciones dignas de trabajo (mínimo un seguro de vida indispensable para realizar su labor).
Para David Monreal, lo importante no es la crisis de seguridad que le está explotando en las manos, sino continuar generando percepción entre los zacatecanos. Por eso su prioridad en días pasados fue poner en marcha un programa de audiencias públicas en Ojocaliente (qué curioso que el municipio de Guadalupe de pronto ya no es el favorito).
Sin embargo, el programa generará más gasto que resultados, y denota la inexperiencia del mandatario en el servicio público. Mayor eficiencia se podría lograr si hubiera coordinación efectiva con los municipios, que son los primeros respondientes ante las necesidades de la población.
De ser el caso, los Ayuntamientos podrían servir como el primer filtro para atender las demandas de la ciudadanía, para luego establecer acuerdos entre estado y municipios ante necesidades de mayor magnitud, llegando al nivel federal cuando se trate de casos muy específicos de atención que excedan la suficiencia presupuestal y las facultades del estado y municipios.
Pero no, el gobernador opta por acudir a eventos organizados a modo, en los que no escapan los reclamos ciudadanos (como ocurrió en Ojocaliente) y pierde el tiempo en demandas que bien pudieran atenderse desde los ayuntamientos, como tapar un bache, reparar una fuga o colocar una lámpara.
Si esa es su idea de mejorar la “percepción ciudadana” respecto a su gobierno, más vale que se vaya preparando para la revocación de mandato, esa donde podría tener consecuencias la “percepción ciudadana” sobre el peor gobernador del país.
¿El adiós a Verónica Díaz?
A propósito de la revocación de mandato realizada el pasado 10 de abril, Zacatecas no destacó por ser de las entidades con mayor participación. Por el contrario, muy apenas se lograron 170 mil 422 votos, que representan el 14.2% del listado nominal de electores.
El problema es que la meta impuesta desde Palacio Nacional había sido de casi 240 mil votos para Zacatecas, por lo que el resultado quedó aún muy lejos de la meta que debía garantizar la delegada de Programas para el Desarrollo, Verónica Díaz Robles, quien mucho menos pudo reunir la cantidad de votos que se lograron en el 2021 para llevar a David Monreal a la gubernatura, incluso con el apoyo de los diputados de la bancada oficialista (y quién sabe si utilizando también recursos públicos).
Estos resultados serían un importante factor para que Díaz Robles tenga los días contados en la delegación del Bienestar, aunado a los desvíos de recursos de los programas del Bienestar presuntamente con fines políticos distintos a los de la Cuarta Transformación (y la prueba está en las cuentas públicas, como se detalla en los informes de la Auditoría Superior de la Federación).
Con este antecedente, Verónica Díaz quedaría fuera de la ruta al 2024 para el Senado de la República (y así se lo habrían hecho saber en la reunión de delegados del pasado 11 de abril, un día después de la revocación de mandato), y para el 2027 si es que aún tenía aspiraciones de buscar la gubernatura.
Lo mismo parece ocurrir con el llamado “Grupo Guadalupe” del que Díaz Robles es madrina, pues el alcalde Julio César Chávez de pronto se ha convertido en el mosqueado de la nueva gobernanza, y al secretario privado, César Artemio González, lo dejaron esperando el nombramiento como titular del INCUFIDEZ tras la renuncia de Albina Cerrillo.
Ante este escenario, avanza el alcalde de Fresnillo, Saúl Monreal, en la ruta al Senado de la República. ¿Pero con quién hará fórmula?
Monreal contra Monreal
Tan mal debe estar la situación en la nueva gobernanza, que hasta el senador Ricardo Monreal no dudó en despotricar contra su hermano, el gobernador David Monreal.
Durante una visita que hicieran estudiantes de la Universidad Autónoma de Zacatecas al Senado, Ricardo Monreal reconoció que el mandatario estatal está haciendo mal las cosas y ha tomado malas (muy malas) decisiones que han manchado al clan Monreal e incluso ya son una piedrita en el zapato en sus aspiraciones presidenciales.
El otrora paladín de la Cuarta Transformación y el obradorismo, hoy se muestra con mayor mesura en sus posicionamientos y en el cabildeo en el Senado. Si no recuérdese las primeras rupturas a partir de la discusión sobre la pregunta para la revocación de mandato y posteriormente, las reformas prioritarias enviadas por el Ejecutivo para su aprobación en el Congreso de la Unión.
No es gratuito que algunas casas encuestadoras incluyan a Ricardo Monreal como parte de los presidenciables por Movimiento Ciudadano y aunque no sea un hecho hasta el momento, sus intentos por generar acuerdos con la oposición, más que recurrir a la aplanadora oficialista, vaya que generan suspicacia en Palacio Nacional.
Por lo pronto, el desempeño de David Monreal y la tensión política en torno a Ricardo Monreal no auguran algo positivo para Zacatecas en el corto plazo, mucho menos sin una oposición que represente una alternativa.