Renata Ávila Valadez, diputada del Partido del Trabajo (PT), propuso ante el pleno de la LXV Legislatura del estado, la creación del delito de Instigación al Suicidio Feminicida, que busca sancionar las muertes violentas de mujeres provocadas o antecedidas por violencia de género.
Durante la sesión ordinaria de este jueves, la legisladora, citó el artículo “Pensamiento e intento suicida en mujeres y su relación con la violencia de género”, publicado por la Revista Española de Investigaciones Sociológicas, que afirma que “ser mujer es un factor de riesgo clave para el suicido. Aunque la proporción de mujeres suicidas frente a los hombres es menor, el número de intentos suicidas llevado a cabo por las mujeres triplica el de los hombres; por lo tanto, podemos deducir que existe un impacto fuerte del género en este fenómeno, el cual, a su vez, está muy asociado a la violencia familiar, los abusos físicos o sexuales y el trastorno mental”.
Según las investigaciones, dijo, “existe una fuerte relación entre antecedentes de violencia de género y conductas suicidas en mujeres, aumentando el riesgo de ideación o intento suicida según la intensidad de la violencia sufrida; también se asocia a angustia psicológica, estrés traumático, miedo y aislamiento. Estos sentimientos pueden derivar en depresión, cuya variable tiene gran capacidad predictiva respecto a las conductas suicidas”.
En ese sentido, afirmó que la Organización de los Estados Americanos y la ONU MUJERES, han planteado como propuesta la estructura del delito de suicidio feminicida y desde 2018 lo incluye en el proyecto de “Ley Modelo Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Muerte Violenta de Mujeres y Niñas (Femicidio/ Feminicidio)”, y que hoy busca que los países miembros, como México, adopten en su legislación penal delitos de esta naturaleza.
Explicó que el término “suicidio feminicida” fue acuñado por la socióloga Diana Russell en 2001, “para describir el fenómeno social de suicidios de mujeres que fueron conducidas a quitarse la vida luego de haber sido víctimas de algún tipo de violencia de género”.
La iniciativa, plantea la creación del artículo 305 bis. del Código Penal para el Estado de Zacatecas para sancionar a quien induzca u obligue a una mujer al suicidio o le preste ayuda para cometerlo, la pena podría ser de hasta 15 años si “el suicidio fuera precedido por cualquier forma de violencia de género del actor contra la víctima; y que el agresor se haya aprovechado de la superioridad generada por las relaciones preexistentes o existentes entre él y la víctima”.
Asimismo, prevé que “si el suicidio no se lleva a efecto, pero su intento produce lesiones, éstas serán consideradas como lesiones calificadas y si la ayuda se prestare hasta el punto de ejecutar el responsable la muerte, la sanción será la que corresponda al delito de feminicidio, según las circunstancias y modos de ejecución”.
La legisladora, presentó una segunda iniciativa que busca reformar el artículo 305 del Código Penal para el Estado de Zacatecas, referente a la Instigación al Suicidio, y busca modificar las sanciones cuando la víctima pertenece a un grupo vulnerable, como menores de edad, personas con discapacidades intelectuales o determinados trastornos psicológicos.
De acuerdo con los especialistas, expuso Renata Ávila, “suelen ser más susceptibles a la influencia o manipulación. Asimismo, reconocer las relaciones de abuso de poder o confianza: Si el agresor ocupa una posición de autoridad o influencia sobre la víctima, como un médico, maestro, familiar, o persona con algún tipo de poder, el acto debe considerarse aún más grave debido al abuso de esa relación”.
Ambas iniciativas, fueron suscritas por diputadas y diputados de distintas fracciones parlamentarias y fueron turnadas a la Comisión Legislativa de Justicia para su discusión y dictaminación.