Para atender la grave crisis que viven los productores de frijol en Zacatecas y Durango, la senadora Geovanna Bañuelos solicita al organismo de Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex) reabrir los centros de acopio, ventanillas de atención para la recepción y compra del frijol en estas entidades.
Mediante un punto de acuerdo que será presentado al Pleno del Senado, la vicecoordinadora del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo resalta que actualmente los productores han vendido sólo un 60% de la cosecha de este año.
Aunado a lo anterior, pese a que se anunció que el Precio de Garantía del frijol sería de 27 pesos por kg, no se ejecutó el Programa como tal pues la recolección del frijol se retrasó por falta de personal y excesivas normas de calidad.
“Desafortunadamente, las y los productores de frijol, se encuentran en una situación sumamente delicada, toda vez que actualmente los centros de acopio de Segalmex en los estados de Zacatecas y Durango, se encuentran cerrados al acopio de frijol, en plena etapa de la cosecha y comercialización del ciclo agrícola PV 24”, lamenta la legisladora.
Asimismo, Geovanna Bañuelos informa que el pasado martes 10 de diciembre se les notificó a los productores de frijol que los centros de acopio de Segalmex, que se encuentran ubicados en principales municipios productores de frijol, se encuentran cerrados.
El argumento, es que por instrucciones de la Secretaría de Hacienda ya no se podrá acopiar más frijol debido al cierre del año y porque ya no hay presupuesto para el pago al productor y por falta de personal.
“Esta condición es muy grave para los productores que faltan de entregar su cosecha, porque los orillan a caer en mano de ‘los coyotes’, quienes ante la noticia de que los centros de acopio han cerrado, están ofreciendo un precio al productor un precio de entre 17 y 18 pesos el kilo por frijol pinto y negro, aprovechándose de las necesidades de los campesinos”, advierte la senadora.
La representante por Zacatecas explica que los precios ofertados por ‘los coyotes’ no cubren los gastos que las y los productores invirtieron en la preparación de la tierra para la siembra, así como los gastos asociados en la producción y en la cosecha
Geovanna Bañuelos, destaca que en el caso específico de Zacatecas se han tenido tiempos muy difíciles por las sequías prolongadas que se han presentado en los últimos años; por lo que con la nueva cosecha se esperaba que se recuperara la economía de las familias productoras.
“Ante esta lamentable situación es necesario tomar cartas en el asunto. Es necesario apoyar a las y los productores para que puedan continuar trabajando la tierra y produciendo frijol, generando economía local y contribuyendo a la autosuficiencia alimentaria”, concluye Geovanna Bañuelos.