
De no haber concesionado el servicio de recolección de basura a la empresa Trash Recolección de Residuos Sólidos SA de CV, de 2020 a 2024 el Ayuntamiento de Guadalupe pudo haberse ahorrado hasta 241.9 millones de pesos, suficientes para adquirir unos 96 camiones recolectores nuevos y hasta tres terrenos para albergar este parque vehicular.
A dos años y medio de que se contratara la concesión del servicio hasta por nueve años, y a cinco años de que el municipio requiriera por primera vez de los servicios de la empresa duranguense (cuyo primer contrato fue en diciembre de 2019), las quejas ciudadanas por el pésimo servicio brindado por Trash ha inundado las redes sociales y los centros de mensajes de gran parte de los medios de comunicación.
Ya desde diciembre de 2024 se advertía no sólo un retraso en las rutas de recolección, sino también en los horarios y días de servicio, lo que hoy ha traído como consecuencia un Guadalupe muy lejos de la imagen que se pretende vender como Pueblo Mágico.
Desde hace varios años, en Lalalá News hemos documentado y denunciado las irregularidades en la contratación de esta empresa, iniciando por sus oscuros orígenes en el vecino estado de Durango, ya con antecedentes de presunto desvío de recursos y corrupción junto a la empresa espejo Círculo Recolector, que comparte los mismos socios.
También dimos a conocer la contratación ilegal de Trash, como consta en las observaciones que hiciera la Auditoría Superior del Estado a la Cuenta Pública 2019 del Ayuntamiento de Guadalupe.
Además, advertimos del sucio proceso legislativo con el que diputados de la 64 Legislatura autorizaron al municipio la concesión del servicio a esta empresa duranguense hasta por nueve años, con una reserva para que esta concesión fuera sujeta a ratificación y/o revocación a mitad del plazo.
Incluso señalamos la presunción de una licitación simulada para la contratación de la concesión para favorecer a Trash debido a que, además de la empresa duranguense, sólo hubo otra participante que apenas fue mero testigo, pues ni siquiera reunía un requisito indispensable para participar en cualquier licitación: no presentó su cédula de inscripción al Padrón de Proveedores.

No es que el Ayuntamiento de Guadalupe hoy se precie de garantizar la transparencia o el acceso a la información. De hecho, su portal de internet lleva semanas en mantenimiento, lo que también ha incidido en que cualquier información cargada en la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT) hoy no pueda ser consultable por la ciudadanía.
Incluso entre la poca información que en su momento llegó a transparentar el municipio, no se encontraban los contratos con dicha empresa (únicamente a través de solicitud de información), mucho menos el contrato correspondiente a la lictación hasta por 9 años para concesionar el servicio de recolección de basura. Y eso que la licitación fue en 2022.
Gracias a que aún existe el derecho de acceso a la infomación, hoy sabemos la gravedad sobre la contratación de Trash y la dimensión en la que han sido afectadas las finanzas municipales, todo en respuesta a la solicitud de información 320590725000002, para requerir «copia digital de todos los contratos, concesiones y/o autorizaciones celebrados entre el Ayuntamiento de Guadalupe y la empresa Trash Recolección de Residuos Sólidos SA de CV, en el periodo entre el año 2020 y el año 2024, sin omitir el contrato relativo a la Licitación Pública No. CONCESIÓNSERVICIOSPÚBLICOS/001/2022«.
La respuesta del sujeto obligado contenía al menos seis documentos:
1. Contrato No. ADQ/DIRSERVPUB/001/2019.
2. Contrato No. MGPESERVPUB/GC/001/2021.
3. Contrato No. MGPESERVPUB/RP/001/2021.
4. Adendum aclaratorio a la cláusula tercera del Contrato MGPESERVPUB/GC/001/2021
5. CONTRATO DE CONCESIÓN No. 001/2022.
6. Contrato No. MGPESERVPUB/GC/001/2021 (con integración de cambios en la cláusula Tercera, según el Adendum aclaratorio).
Sin embargo, al analizar la información a detalle, encontramos inconsistencias en la información que llevan a pensar en un sobrecosto de hasta 56.51% respecto a lo que hubiera gasta el Ayuntamiento sin concesionar el servicio de recolección de basura.
Los contratos

En la respuesta a la solicitud de información 320590725000002 se incluyeron los siguientes documentos:
Contrato No. ADQ/DIRSERVPUB/001/2019: derivado de la licitación pública nacional No. 005-2009, para la «contratación del servicio de recolección de basura». El plazo contratado fue del 1 de enero al 31 de diciembre de 2020 (aunque el contrato fue firmado el 2 de diciembre de 2019; es decir, no fue en el mismo ejercicio fiscal). El monto a pagar fue de 650 mil pesos semanales, equivalentes a un monto anual de 33 millones 800 mil pesos.
Contrato No. MGPESERVPUB/GC/001/2021: El plazo contratado fue del 1 de enero al 14 de septiembre de 2021 (fecha en que concluía la administración 2018-2021). Al igual que el contrato anterior, este también fue firmado en otro ejercicio fiscal (23 de diciembre de 2020), por un monto de 850 mil pesos semanales, es decir, 31 millones 85 mil 714.68 pesos en el periodo contratado.
Contrato No. MGPESERVPUB/RP/001/2021: Se trata de un contrato plurianual, firmado el 25 de octubre de 2021, por un plazo del 4 de noviembre de 2021 al 14 de septiembre de 2024 (fecha en que concluía la administración 2021-2024). El monto a pagar habría sido de 179 millones 99 mil 458.16 pesos por el plazo contratado, con montos variables por semana, según el año y el incremento porcentual anual de la inflación acorde con el Índice Nacional de Precios al Consumidor.
Adendum aclaratorio a la cláusula tercera del Contrato MGPESERVPUB/GC/001/2021: Incluye una fe de erratas. Se refiere únicamente a una aclaración en el monto anual de inversión (31 millones 85 mil 714.68 pesos) y la ratificación del plazo de contratación del servicio (del 1 de enero al 14 de septiembre de 2021). El adendum fue firmado el 28 de diciembre de 2020, es decir, dos meses después de firmado el contrato original.
Contrato de Concesión No. 001/2022: Derivado de la licitación pública estatal No. CONCESIONSERVICIOSPUBLICOS/001/2022, luego de la autorización de la 64 Legislatura para concesionar el servicio hasta por 9 años (5 de septiembre de 2022 al 31 de julio de 2031). De acuerdo con el documento, el monto a pagar serían 1 millón 94 mil 232.22 pesos sin IVA (1 millón 269 mil 309.37 pesos con IVA), por un plazo de 464.5714 semanas. El monto global de inversión serían 709 millones 471 mil 575.22 pesos (incluyendo impuestos).
Un detalle que llama la atención es que en dos de los contratos, los firmantes fueron: Julio César Chávez Padilla, alcalde; María de la Luz Muñoz Morales, síndica; José Alejandro Zapata Castañeda, tesorero; Francisco Javier Soria Hernández, director de servicios públicos.
Sin embargo, tanto el Contrato No. MGPESERVPUB/RP/001/2021 como el Contrato de Concesión No. 001/2022 no fueron firmados por el entonces tesorero (recordemos que José Alejandro Zapata Castañeda, quien había sido tesorero en la administración 2018-2021, fue regidor en la administración 2021-2024).
En ambos documentos únicamente consta las firmas del entonces alcalde Julio César Chávez Padilla, la síndica María de la Luz Muñoz Morales y el director de Servicios Públicos Municipales, Francisco Javier Soria Hernández, un aspecto que no mereció la atención de la Auditoría Superior del Estado en su revisión a las Cuentas Públicas. ¿O pagarían por el silencio del auditor Raúl Brito Berumen?
Dos instrumentos jurídicos al mismo tiempo

De los documentos remitidos en la respuesta a la solicitud de información 320590725000002, advertimos que hay al menos dos contratos con la empresa Trash, para el mismo servicio de recolección de basura, ambos simultáneos para un periodo de dos años, pero con modalidades diferentes y pagos diferentes.
Se trata del Contrato No. MGPESERVPUB/RP/001/2021, de carácter plurianual para el periododel 4 de noviembre de 2021 al 14 de septiembre de 2024; así como el Contrato de Concesión No. 001/2022, derivado de la licitación pública estatal No. CONCESIONSERVICIOSPUBLICOS/001/2022 para un periodo de nueve años, contados a partir del 5 de septiembre de 2022 y hasta el 31 de julio de 2031.
Eso significa que ambos instrumentos legales (y sus obligaciones entre las dos partes) estuvieron vigentes de manera simultánea del 5 de septiembre de 2022 al 14 de septiembre de 2024, y en el supuesto de que el municipio hubiera pagado por ambos documentos durante dicho periodo, habría erogado hasta 268 millones 822 mil 994.46 pesos.
Esta sospecha se refuerza al revisar sus informes financieros relativos a la Balanza de Comprobación de Pagos correspondiente al segundo trimestre de 2022 (1 de abril al 30 de junio de 2022, es decir, antes de que se licitara la concesión del servicio hasta por 9 años), donde se incluyen los conceptos «Contratos para inversión mediante proyectos para prestación de servicios (PPS) y similares» e «Inversión pública contratada mediante proyectos para prestación de servicios (PPS) y simuilares«, ambos por la cantidad de 354 millones 512 mil 47.01 pesos.
También existe el supuesto de que, una vez entrado en vigor el contrato de concesión del servicio hasta por 9 años, haya perdido sus efectos el contrato plurianual que concluía el 14 de septiembre de 2024. Sin embargo, no existe registro como tal entre las cláusulas del contrato de concesión y mucho menos se incluyó algún adendum aclaratorio en la solicitud de información 320590725000002, como sí se hizo con el Contrato MGPESERVPUB/GC/001/2021.
Los falsos ahorros

En sesión del Pleno de la 64 Legislatura del 14 de diciembre de 2021, aprovechando la aprobación del llamado matrimonio igualitario, se sometió a consideración del Pleno el dictamen relativo a la solicitud del Ayuntamiento de Guadalupe para que se le autorizara a «concesionar parcialmente el servicio de recolección, traslado, tratamiento y disposición final de residuos sólidos en el municipio».
En el cuerpo del dictamen se incluyó un análisis de la comisión dictaminadora en el que se argumentaba que concesionar el servicio resultaría más barato al municipio que si éste continuara asumiendo su responsabilidad constitucional.
Sin embargo, su cálculo estaba amañado y así lo advertimos en su momento, pues entre sus cuentas incluían un gasto anual por 57 millones 600 mil pesos para adquirir 32 camiones recolectores nuevos, así como 20 millones 180 mil pesos por el costo de un terreno para operaciones.
En realidad, para el año 2021, el servicio de recolección sin concesionar costaba al municipio unos 36 millones 507 mil 92 pesos al año, una cifra muy inferior al estimado por 80 millones 902 mil 466 pesos anuales que estimó la comisión legislativa en su dictamen. Y así se aprobó por mayoría.
Entonces, ¿cuánto se pudo ahorrar el Ayuntamiento si no hubiera concesionado el servicio de recolección de basura?
En 2020, el servicio concesionado a Trash costó 33 millones 800 mil pesos; sin concesión hubiera costado 35 millones 392 mil 236.36 pesos. Para el 2021, la concesión contratada del 1 de enero al 14 de septiembre tuvo un costo de 31 millones 85 mil 714.68 pesos; sin concesión hubiera costado al municipio 25 millones 554 mil 964.34 pesos.
Y luego viene la polémica por los dos instrumentos legales simultáneos. Por ejemplo, del 4 de noviembre al 31 de diciembre de 2021, primer periodo que abarcó el contrato plurianual, la concesión del servicio tuvo un costo de 7 millones 42 mil 857.13 pesos; sin concesión hubiera costado 5 millones 616 mil 475.68 pesos.
Para el 2022, también con el contrato plurianual, la concesión tuvo un costo de 54 millones 598 mil 829.03 pesos; sin concesión hubiera costado 38 millones 547 mil 838.44 pesos. Para el 2023, la concesión costó 64 millones 457 mil 817.20 pesos; sin concesión hubiera costado 39 millones 819 mil 917.10 pesos.
Ya para el 2024, del 1 de enero al 14 de septiembre según el contrato plurianual, la concesión costó al municipio 52 millones 999 mil 954.80 pesos; sin concesión le hubiera costado 41 millones 173 mil 794.28 pesos.
Los cálculos son similares en el caso del Contrato de Concesión No. 001/2022. Por ejemplo, para el 2022, con el contrato de concesión hasta por 9 años, desde la entrada en vigor del contrato el servicio costó al municipio unos 25 millones 198 mil 23.34 pesos; sin concesión hubiera costado 12,231,525.57 pesos.
Para el 2023 y 2024, la concesión habría costado unos 79 millones 411 mil 952.36 pesos cada año, según las cláusulas del contrato de concesión por nueve años a precio fijo por año durante las 464.5714 semanas de vigencia; sin concesión el servicio hubiera costado al municipio 39 millones 819 mil 917.10 pesos y 41 millones 173 mil 794.28 pesos, respectivamente.
No obstante, en el caso de que se hubiera pagado por los dos instrumentos legales de manera simultánea (el contrato plurianual y el contrato de concesión hasta por 9 años), de 2020 a 2024 el municipio habría erogado hasta 428 millones 7 mil 100.90 pesos; sin concesionar el servicio, el municipio únicamente habría gastado 186 millones 105 mil 226.20 pesos. Es decir, hubiera tenido un ahorro de 241 millones 901 mil 874.70 pesos, que significan un 56.51% más barato que concesionar el servicio a la empresa Trash.
¿Revocar la concesión o mantenerla?
De acuerdo con la reserva aprobada por la 64 Legislatura para la concesión parcial del servicio de recolección hasta por nueve años, para mediados de febrero de 2027 esta concesión deberá ser sometida a un proceso de revocación y/o ratificación.
Sin embargo, hasta donde se sabe, el actual presidente municipal de Guadalupe, José Saldívar Alcalde, ha recibido presiones para que dé marcha atrás al contrato de concesión con Trash, incluso sugiriendo que el alcalde de facto es el extesorero (¿o fue ratificado como actual tesorero en la administración 2024-2027?) José Alejandro Zapata Castañeda.
Además, no se puede dejar de preguntar qué pasó con el parque vehicular para la recoleccipon de basura que era propiedad del municipio y que fue rematado, a precio de ganga, al Ayuntamiento de Fresnillo. ¿Se desmanteló la unidad de recolección a propósito, para perpetuar la concesión del servicio en futuras administraciones?
Finalmente, después del cochinero que ha demostrado la empresa Trash con su pésimo servicio de recolección de basura, carísimo de Guadalupe, ¿qué piensan los habitantes del municipio que pagan sus impuestos y no están satisfechos con este servicio?
