Desde octubre de 2020 lo advertíamos en este espacio: los dichosos Programas del Bienestar mostraban inconsistencias que sugerían posible desvío de recursos. Y aunque análizábamos únicamente la escasa información relativa a Zacatecas, la eventual publicación de padrones de beneficiarios hoy nos permite contar con más elementos para confirmar dicha hipótesis.
En aquel entonces, el expresidente Andrés Manuel López Obrador había informado que 7 de cada 10 familias zacatecanas eran beneficiadas con al menos uno de los Programas del Bienestar, con una inversión cercana a los 7 mil millones de pesos distribuidos entre 340 mil zacatecanos y zacatecanas.
Sin embargo, la población de Zacatecas se estimaba en más de 1 millón 500 mil habitantes (según las proyecciones del Consejo Nacional de Población, exactamente 1 millón 647 mil 38 habitantes para la mitad de 2020), por lo que con los Programas del Bienestar no se habría llegado siguiera al 30% de zacatecanos y zacatecanas beneficiadas durante el 2020.
Esos eran los resultados de la Delegación de Programas para el Desarrollo en Zacatecas cuando entonces la encabezaba la hoy senadora Verónica Díaz Robles, un periodo en el que señalábamos que la escasa información transparentada sobre dichos programas mostraba irregularidades que luego confirmaría la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
Lo dimos a conocer en este espacio en marzo de 2021: según la Auditoría De Cumplimiento: 2019-0-20100-19-0246-2020, 246-DS, correspondiente a la tercera entrega de informes individuales sobre la revisión a de la Cuenta Pública 2019 de la ASF, la Secretaría del Bienestar tenía que aclarar un monto de 992 millones 680 mil 415 pesos correspondientes al Programa de Pensiones del Bienestar para Adultos Mayores.
De ese monto, 70 millones 606 mil 700 pesos correspondían a la Delegación de Programas para el Desarrollo de Zacatecas, que entonces encabezaba la delegada Verónica Díaz Robles.
El tiempo ha pasado y todo indica que, en lugar de corregir las irregularidades, éstas se han incrementado. El problema es que el caso de Zacatecas no es aislado, sino que sería una dinámica que se replicaría en 29 de los 32 estados del país.
A propósito de que este martes la ASF presentará ante el Congreso de la Unión la segunda entrega de informes individuales a la Cuenta Pública 2024, nos dimos a la tarea de hacer un pequeño análisis específicamente sobre la Pensión del Bienestar para Adultos Mayores, al comparar el número de beneficiarios que reporta la Secretaría del Bienestar en el portal del Padrón Único de Beneficiarios y las proyecciones de población estimadas por el Consejo Nacional de Población (CONAPO).
A nivel nacional, para este 2025, el CONAPO proyectaba una población de 11 millones 698 mil 499 adultos y adultas mayores de 65 años y más. Sin embargo, de acuerdo con el padrón de beneficiarios de la Secretaría del Bienestar, en todo el país se tenían 11 millones 768 mil 452 beneficiarios y beneficiarias de la Pensión del Bienestar para Adultos Mayores (cuyo principal requisito es tener 65 años de edad o más).
Eso significa una diferencia de 69 mil 953 adultos mayores presuntamente beneficiarios del programa, que no corresponden con las proyecciones de población para este año. Y eso implicaría unos 433 millones 708 mil 600 pesos que no tendrían sustento, pero se están devengando.
No obstante, esta cifra también es relativa, pues si se analiza la información por cada entidad federativa, tenemos que sólo Nuevo León, Quintana Roo y Baja California Sur tendrían un menor número de beneficiarios de la Pensión que el total de su población de 65 años y más proyectada por el CONAPO.
Restando este déficit, entre las 29 entidades federativas que muestran disparidad entre el número de beneficiarios y las proyecciones de población del CONAPO, tendríamos una diferencia de 983 mil 964 personas que son beneficiarias de la citada Pensión para Adultos Mayores, pero que superan las proyecciones del CONAPO. O sea, población que en teoría no existe. Y eso implicaría un monto de 6 mil 100 millones 576 mil 800 pesos… por bimestre en lo que va de este 2025, sin tener un sustento.
Siguiendo con este comparativo, de acuerdo con el CONAPO, Zacatecas sería la octava entidad con menor número de adultos mayores de 65 años y más en el país. En contraste, según el portal de la Secretaría del Bienestar, sería la décima entidad con menor número de beneficiarios de la Pensión de Adultos Mayores, pero también la décima entidad con mayor proporción de irregularidades.
Según el último padrón transparentado por la Secretaría del Bienestar, en Zacatecas se tendrían unos 190 mil 79 beneficiarios de la citada Pensión; no obstante, según las proyecciones del CONAPO, para este año se estimaba una población de apenas 149 mil 121 adultos mayores de 65 años y más.
Eso dejaría una diferencia de 40 mil 958 beneficiarios que exceden las proyecciones del CONAPO, y que representarían unos 253 millones 939 mil 600 pesos bimestrales con inconsistencias.
Lo anterior haría pensar que son ciertas las denuncias en las que se acusa el presunto extravío de tarjetas de este programa, pero cuyos recursos bimestrales se siguen cobrando. Y apenas hablamos de un solo programa, lo que sugeriría que las irregularidades podrían ser mayores considerando que estas inconsistencias se replican en otros programas, como la Pensión Universal para Personas con Discapacidad.
No es gratuito que en la Delegación de Programas para el Desarrollo en Zacatecas que hoy encabeza Adilene Rosales anden nerviosos con la auditoría en la que se encuentran, pues podría salir a flote parte de este cochinero en la tercera y última entrega de informes individuales a la Cuenta Pública 2024 por parte de la ASF. Pero, pues, cada quién con su honestidad y discursos de «no mentir, no robar y no traicionar». Y menos lucrar con programas elevados a rango constitucional, ¿verdad?
