COVID-19: Un monstruo subestimado

Era un 7 de mayo del 2009. Por la mañana el Gobierno Federal había declarado la reanudación de todas las actividades, luego de una suspensión temporal durante 8 días debido a la pandemia por la influenza AH1N1. En ese lapso se estima que nuestro país perdió 4 mil millones de pesos y la economía tuvo un crecimiento negativo del -7 por ciento durante el segundo trimestre.

Hoy nos enfrentamos a un nuevo monstruo: el COVID-19, que en México ya ha dejado estragos en los más de dos meses que van de emergencia sanitaria y una estimación de -6.5 por ciento en el crecimiento de la economía del país para el segundo trimestre de 2020, una proporción superior al -5.3 por ciento para América Latina y el Caribe.

No hay duda de que uno de los principales sectores que ha sido más golpeado por esta emergencia sanitaria es el turismo, especialmente en Zacatecas, y esta contingencia pone a prueba lo que pudimos haber aprendido del 2009. ¿Vamos por el camino correcto? Analicemos la historia.

Hace 11 años, cuando la contingencia por el AH1N1, en Zacatecas se aplicaron medidas preventivas similares a las actuales con el COVID-19, incluyendo acciones para proteger los empleos y apoyar económicamente a los prestadores de servicios. Pero las principales acciones se publicaron en un Decreto Gubernativo de Estímulos Fiscales, entre las cuales destaca:

* Estímulo del 100 por ciento en el Impuesto sobre Servicios de Hospedaje (segundo, tercer y cuarto trimestre de 2009).

* Exención del 100 por ciento en el pago del Impuesto Sobre Nómina 2009 a pequeñas y medianas empresas que tuvieron hasta 10 trabajadores al finalizar el 2008, y del 100 por ciento de abril a diciembre a las que tuvieron hasta 30 trabajadores al finalizar febrero de 2009.

* Estímulo del 50 por ciento en el pago de impuestos del Régimen de Pequeños Contribuyentes (hoy, Régimen de Incorporación Fiscal).

Estos estímulos aminoraron el impacto que generó la caída del 15.12 por ciento en la captación de turistas entre mayo de 2008 y 2009, una cifra no tan grave si se considera que en aquel tiempo el Festival Cultural que se realizaría del 4 al 18 de abril no se suspendió, aunque los niveles promedio de ocupación hotelera se reestablecerían hasta el 2 de junio; es decir, poco más de un mes después de que fuera declarada emergencia sanitaria por la influenza AH1N1.

Hoy nos enfrentamos al monstruo del COVID-19, con más de dos meses de estragos (y contando), con la cancelación de grandes eventos como el Festival Cultural y la suspensión temporal (y prolongada) de la mayoría de las actividades económicas de las que depende Zacatecas. Muchos han sido los esfuerzos por contener esta pandemia, pero habrá que preguntarse si han sido suficientes y si bastarán para levantar nuestra economía.En el 2009 tardó poco más de un mes en recuperar sus niveles promedio tras 8 días de suspender todas las actividades Hoy llevamos más de dos meses con esta suspensión; en consecuencia, ¿cuánto tardaremos en recuperar nuestros niveles promedio de crecimiento económico? De ese tamaño es el monstruo que hoy se subestima.