En el año 2021 México se vio afectado por presiones inflacionarias asociadas a la pandemia y cerró el año con una tasa de inflación anual de 7.36%, la más alta en 21 años, debido al aumento sostenido en los precios de los alimentos y los combustibles.
A pesar de que en el mes de enero en México la inflación observó una disminución, en los meses posteriores se agravó por los efectos de la guerra entre Rusia y Ucrania, ya que son importantes productores de materias primas, así como los principales productores de granos del mundo, como el trigo y el maíz.
Lo anterior agravó los aumentos de precios sobre todo del petróleo y gas, que a su vez incidieron en el aumento del costo de los fertilizantes y algunos granos. Así, la inflación anual en México en el mes de abril alcanzó 7.68%. En Estados Unidos la inflación anual en abril fue de 8.3 por ciento.
En abril, la inflación se ubicó por arriba de la media nacional en 22 estados, los que observaron mayor inflación anual fueron: Campeche, 9.86; Oaxaca, 9.11%; Zacatecas, 8.83%; Michoacán, 8.80%; Baja California, 8.73% e Hidalgo, 8.68 por ciento. Por ciudad, Fresnillo se ubicó en 9.26%, de las más altas.
¿Quiénes resienten más los efectos de la inflación?
Los peores efectos de la inflación los resienten las familias con menores ingresos, ya que su capacidad de compra de productos de la canasta básica para cubrir sus necesidades alimenticias se ve seriamente afectada, lo que se traduce en pérdida del poder adquisitivo, principalmente para los que menos tienen, ya que los precios de los alimentos son los mismos para todos, tengan más o menores ingresos.
Las familias con menores recursos destinan la mayor parte de sus ingresos a la adquisición de productos de la canasta básica, cuyo costo se ha venido encareciendo, extendiendo aún más las brechas en materia de ingresos, así como de otros indicadores socioeconómicos.
Por ejemplo, las familias con mayores ingresos destinan una gran parte de sus gastos en educación privada para sus hijos, donde las colegiaturas han tenido un aumento relativamente bajo, así como la adquisición y mantenimiento de automóviles.
Pobreza laboral
Es importante dimensionar la difícil situación de pérdida del poder adquisitivo que están teniendo las familias en pobreza y extrema pobreza. De acuerdo a datos del Consejo Nacional de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), tenemos la evolución del ingreso laboral y su relación con el costo de la canasta alimentaria, lo que permite obtener el porcentaje de pobreza laboral.
Entre el primer trimestre de 2021 y el primer trimestre de 2022, el porcentaje de la pobreza laboral presentó una disminución a nivel nacional de 3.2 puntos porcentuales, al pasar de 42.0% a 38.8%, respectivamente a pesar del contexto en que la inflación general anual promedio del primer trimestre de 2022 se ubicó en 7.3 por ciento.
Sin embargo, la pobreza laboral en los estados del país resulta heterogénea. En el citado período, la pobreza laboral disminuyó en 21 de las 32 entidades federativas. Las mayores disminuciones en el porcentaje de pobreza laboral se observaron en: Baja California con 4.6 puntos porcentuales; Chiapas con 4.0 y Nayarit con 3.8. En contraste, las entidades con mayor aumento fueron: Zacatecas con 5.6 puntos porcentuales; Hidalgo con 3.9 y Tamaulipas con 2.5 por ciento.
La medición revela que las entidades con mayor porcentaje de pobreza laboral en el primer trimestre 2022 fueron: Chiapas, con el 65.3%; Guerrero, 61.0% y Oaxaca con 60.4% de su población en pobreza.
Por su parte, la línea de la pobreza por ingresos en el ámbito rural presentó la mayor disminución con 2.8 puntos porcentuales, al pasar de 54.8% a 51.9%. Mientras que en el ámbito urbano se presentó una disminución de 1.0 punto porcentual, al pasar de 35.7% a 34.7 por ciento.
También de acuerdo al sexo existen diferencias, ya que en el primer trimestre de 2022 los hombres ocupados reportaron un ingreso laboral mensual de $7,169.93 y las mujeres $5,763.28. Lo anterior indica en términos relativos que en el primer trimestre de 2022 el ingreso de los hombres ocupados es aproximadamente 1.2 veces el de las mujeres.
En cuanto a los ingresos de acuerdo a la situación de formalidad, los ocupados formales reportaron un ingreso laboral mensual de $9,305.82, aproximadamente el doble de los ocupados en trabajos informales ($4,623.27). Del cuarto trimestre 2021 al primer trimestre 2022, el incremento del ingreso laboral real promedio de la población ocupada informal (5.6%) fue mayor que el de los formales (4.0%).
Evaluación de programas sociales
Los programas sociales actuales no están bien diseñados, ya que no garantizan la atención de las necesidades de la población de más bajos recursos, además de existir opacidad en los programas. El Índice de Desempeño de los Programas Públicos Federales de 2021 destaca que el 84% de los programas sociales de Gobierno de AMLO son ineficientes, a pesar de recibir 621 mil millones de pesos. Asimismo, de 96 programas sociales analizados, solo 15 tuvieron un desempeño óptimo.
Entre las recomendaciones que emite el estudio del INDEP están: realizar una revisión integral de la política social que identifique prioridades claras antes de pensar en cualquier incremento presupuestal; la administración federal debe plantear una revisión integral de la política social para evitar los actuales niveles de dispersión.
Consideraciones finales
El incremento de la inflación es serio y preocupante ya que ha deteriorado el poder adquisitivo de las familias en situación más vulnerable, afectando en forma drástica a los estados del sureste mexicano y a las mujeres, por lo que existe la necesidad de que los gobiernos las protejan con apoyos focalizados, ya que actualmente se basan en transferencias monetarias que no necesariamente son dirigidas a la población en pobreza y pobreza extrema.
El Banco de México (Banxico) ha endurecido la política monetaria al igual que en otros países, incrementando las tasas de interés para combatir la alta inflación. Tampoco es buena idea introducir subsidios generalizados en los que se benefician todos los consumidores, es importante beneficiar a los que menos tienen. La difícil situación a la que nos enfrentamos exige adoptar medidas de política asertivas en el país para mejorar las perspectivas económicas de los mexicanos.