La inseguridad en Zacatecas no es un problema nuevo, se ha ido gestando desde hace varios años. Sin embargo, se ha intensificado en los últimos tiempos debido a la presencia de grupos delincuenciales que pelean por la zona que se encuentra en una posición geográfica estratégica y cuenta con una rica cultura e historia, por lo que hemos sido afectados por la violencia y el crimen organizado.
Uno de los momentos más críticos en cuanto a inseguridad en Zacatecas se registró a partir del año 2006, cuando el gobierno federal lanzó una estrategia de combate al narcotráfico y al crimen organizado. A partir de entonces, se registró un incremento en la violencia y los delitos en varias regiones del país, incluyendo a Zacatecas.
Desde entonces, el estado ha enfrentado diversos retos en materia de seguridad, como el control territorial de grupos criminales y la violencia derivada de la lucha por el control del mercado de drogas.
Entre los delitos que también han aumentado en la entidad se encuentran el robo a casa habitación, el secuestro, la extorsión, el homicidio y el robo de vehículos. Según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), durante el primer semestre de 2021 se registraron 171 homicidios dolosos en el estado, lo que representa un aumento del 14% en comparación con el mismo período del año anterior. En este 2023 ya superamos estos datos.
A pesar de los esfuerzos de las autoridades para combatir la inseguridad en Zacatecas, aún es un problema presente en la entidad, por lo que la semana pasada por fin se presentó una estrategia pública surgida de un foro para que sociedad y gobierno intentemos hacer frente a este problema que nos aqueja a diario.
La Estrategia Estatal para la Construcción de Paz, Prevención y Convivencia Ciudadana se compone de tres objetivos prioritarios y 10 estrategias que permitirán atender las causas y factores de riesgo que detonan la violencia y la delincuencia.
La inseguridad es un problema complejo que requiere de una estrategia integral y coordinada para abordarlo. El plan presentado contiene algunas de las estrategias que podrían ser efectivas para combatir y prevenir la inseguridad en México y que ojalá se consideren y se ejecuten para que los primeros resultados podamos verlos a corto plazo.
Fortalecimiento de las instituciones de seguridad: Se debe fortalecer a las instituciones encargadas de garantizar la seguridad pública, como la policía y el sistema de justicia penal. Esto incluye la capacitación de los agentes de seguridad, la mejora de los salarios y condiciones de trabajo, y la modernización de los equipos y tecnologías que utilizan.
Prevención del delito: Es importante implementar programas de prevención del delito para reducir la incidencia delictiva. Estos programas pueden incluir actividades deportivas y culturales para los jóvenes, la creación de empleos y oportunidades económicas para los sectores vulnerables, y campañas de concientización y educación sobre los riesgos de la delincuencia.
Combate al crimen organizado: Es fundamental implementar medidas para combatir el crimen organizado, como la colaboración entre las instituciones de seguridad de diferentes estados y países, la identificación y persecución de líderes criminales, y la confiscación de sus bienes.
Participación ciudadana: Es importante fomentar la participación ciudadana en la prevención del delito y en el fortalecimiento de la seguridad pública. Esto puede lograrse mediante la creación de comités vecinales y la organización de programas de vigilancia y denuncia ciudadana.
Protección a las víctimas del delito: Las víctimas del delito necesitan protección y atención, por lo que se deben implementar medidas para garantizar su seguridad y bienestar. Esto incluye la creación de programas de asistencia a las víctimas y la mejora de los servicios de atención médica y psicológica.
Combate a la corrupción: La corrupción es uno de los principales obstáculos para el fortalecimiento de la seguridad pública, por lo que se deben implementar medidas para combatirla. Esto incluye la creación de organismos independientes encargados de investigar y sancionar la corrupción en el sector público.
Fortalecimiento de la cooperación internacional: La lucha contra la delincuencia organizada es un problema global, por lo que se debe fortalecer la cooperación internacional en materia de seguridad pública. Esto incluye la colaboración entre las instituciones de seguridad de diferentes países, la implementación de acuerdos y tratados internacionales, y la creación de una agenda común en la materia.
Sin una ejecución seria de estas propuestas y las incluidas en la Estrategia Estatal para la Construcción de Paz, Prevención y Convivencia Ciudadana, la buena voluntad quedará solo en teoría y simulación. Por el bien de todos, esperemos lo mejor.