El Gobierno Federal continúa violando la División de Poderes y la legalidad. Esta vez lo hace a través de la Secretaría de Educación Pública que persiste en su desacato a la autoridad, pues no sólo se negó a detener la impresión de los Libros de Texto Gratuitos de primaria y secundaria, sino que también rebasó todo límite posible en su atrevimiento de distribuir la criticada edición para el ciclo escolar 2023-2024.
Al gobierno encabezado por Andrés Manuel López Obrador no le importaron las resoluciones emitidas por el Poder Judicial, en mandato de la Jueza Tercera de Distrito en Materia Administrativa de la Ciudad de México, que hace más de dos meses le ordenó detener la impresión de los Libros de Texto Gratuitos, a fin de que los contenidos pudieran ser revisados y evaluados por expertos y en consultas públicas.
Fueron desacatadas las dos resoluciones: la provisional, del 21 de mayo, y la definitiva, del 25 de mayo. Y hoy nos encontramos en un gran dilema, porque la federación ya está distribuyendo los textos gratuitos del periodo escolar que iniciará el próximo 28 de agosto. Mientras tanto, crece la inconformidad de miles de madres y padres de familia que se ampararon por desconocer la totalidad de los contenidos, y que, a través de revisiones parciales saben, tienen una elevada carga ideológica y politiquería, cuyo fin es el adoctrinamiento de las y los futuros ciudadanos mexicanos.
Además, desaparecieron los libros de Español, Matemáticas, Biología, Historia Universal y de México, Geografía e Historia, materias a las que se dedican sólo unas cuantas páginas, diseminadas en varios de los textos.
¿Sabe usted cuál fue la argumentación de la SEP y del Presidente de México para incumplir la orden judicial de frenar la impresión y distribución de los Libros de Texto Gratuitos emitida hace más de 60 días por el Poder Judicial? Pues que hasta el 1 de agosto no habían recibido ninguna notificación oficial sobre un amparo.
Esa justificación es irrisoria, dado que las suspensiones surten efectos al momento de decretarse y no hasta que se notifican. Además, tuvieron conocimiento de ellas inmediatamente, porque fueron difundidas por los medios de comunicación. Ante el incumplimiento de la Federación, la jueza dio 24 horas para detener la distribución en todas las primarias y secundarias del país. El plazo ya venció.
Esa ilegalidad se refuerza por la falta de transparencia del Ejecutivo Federal, que extrañamente y sin justificación reservó por cinco años el Plan de Estudios y con ello se desconoce el método elegido para elaborar los Libros de Texto Gratuitos. Información que debe ser pública.
Pero claro, López Obrador siempre quiere imponer su voluntad, así tenga que violar la legalidad, como el buen dictador que es. Y no es la primera vez que lo hace, recordemos que el mes pasado el Instituto Nacional Electoral determinó que en Las Mañaneras el Presidente debe evitar posicionamientos electorales y hablar en cualquier sentido de aspirantes presidenciales. Para evitar ser notificado la Consejería Jurídica del Ejecutivo Federal se negó a recibir el documento por encontrarse en “periodo de vacaciones”, aunque su titular sí asistió a un evento oficial en esas mismas fechas.
Desde la oposición, especialmente desde el Partido Acción Nacional (PAN), somos respetuosos de la Constitución y siempre seremos fieles vigilantes de que se cumplan las leyes, así se trate del Presidente de México y sus secuaces.