La bioética promueve una serie de principios para la correcta interacción del ser humano con la vida, tanto con sus semejantes como con otros seres vivos. Se debe vincular con la protección al medio ambiente, sólo juntos los valores morales y éticos de los ciudadanos con el respeto y el cuidado del entorno garantizarán la mitigación del cambio climático y la supervivencia de las futuras generaciones.
La bioética es una nueva filosofía que pretende integrar la biología, ecología, la medicina y los valores humano. Fue la propuesta del bioquímico estadounidense Van Rensselaer, en 1970. En los años siguientes se desarrolló una concepción que reducía la bioética al campo de la medicina. Pero el mismo Rensselaer la define como la relación entre la biosfera y la población humana.
Encuentra aplicación en muchas disciplinas y cuestiones humanas, desde los debates sobre los límites de la vida, como el aborto, la eutanasia o la maternidad; también alcanza a las aplicaciones de la biotecnología, ingeniería genética, que afecta a humanos, animales y plantas; o el impacto de la contaminación del aire, suelo y agua sobre los seres vivos.
La bioética tiene los siguientes principios:
- Autonomía. Los derechos de un individuo a la autodeterminación y el respeto a su capacidad de tomar decisiones informadas sobre asuntos personales con libertar.
- Beneficencia. Se refiere a las acciones que promueven el bienestar de los demás, en el contexto médico esto significa velar por los intereses de los pacientes y sus familias.
- No maleficencia. Se plasma en la frase “ lo primero es no hacer daño”,
- Justicia. La distribución de los recursos sanitarios escasos y a la decisión de quién recibe tratamiento, así como a la selección adecuada de las personas que participan en las investigaciones
La bioética ambiental es la parte de la filosofía que amplía los límites tradicionales de la bioética, pasando de atender únicamente a los seres humanos a incluir los derechos del resto de seres vivos en los valores éticos y morales, incorporando cuestiones como el respeto a la naturaleza o si podemos utilizarla y protegerla al mismo tiempo.
Por lo tanto, la bioética ambiental desempeña un papel muy importante en la sostenibilidad y en la mitigación del impacto de la actividad humana en el medio ambiente, cuestiones que van desde la pérdida de biodiversidad a la deforestación y el efecto invernadero, la contaminación de los océanos o la sobre explotación de recursos.
Si bien la bioética fue un ciencia que se desarrolló para aplicar en la medicina, los mismos principios que se aplican ahora para cuidar el medio ambiente, quizás es el momento de ir del método científico a lo social, y de lo social al método científico.