“Qué bien nos vendría un abrazo que nos acomode un poco, que nos haga ver que no estamos tan solos, ni tan locos, ni tan rotos”. Mario Benedetti.
Abrazar es ceñir con los brazos, estrechar entre los brazos en señal de afecto. Los abrazos transmiten mucho y pueden utilizarse para dar seguridad, demostrar amor y conectar con los demás, incluso cuando una persona se siente triste o con baja autoestima, el hecho de abrazarla la puede ayudar a recordarle que no está sola y darle un sentido de pertenencia. También es válido abrazarse a sí mismo.
Un abrazo es una de las mejores maneras de expresar cariño y afecto, un abrazo reconforta, aporta seguridad, hace sentir bien a quien lo recibe y a quien lo da. Los abrazos proporcionan beneficios emocionales y físicos, reduce el estrés, la ansiedad y la tristeza. Los abrazos son tan necesarios para la salud como tener una buena alimentación, hacer ejercicio y mantenerse activo.
Origen del Día Internacional del Abrazo
El 21 de enero se conmemora el “Día Internacional del Abrazo”, desde 1986. Fecha creada por el psicólogo Kevin Zaborney, de origen estadounidense, quien al darse cuenta de que a los estadounidenses se les dificultaba hacer demostraciones de afecto en público, incluso con los miembros de su familia, se preocupó y pensó en crear un día para celebrar con abrazos.
Esta fecha nos invita a reflexionar sobre la extraordinaria capacidad de un gesto tan simple. Este día destaca cómo el abrazo va más allá de una muestra de cariño; es una herramienta que impacta positivamente en la salud mental, emocional y física.
El abrazo a un hijo
Cuando nuestros hijos están pequeños, generalmente los cargamos, los abrazamos durante mucho tiempo, o al menos hasta después de que empiezan a caminar, el abrazo transmite el amor incondicional de los padres a los hijos, seguridad y confianza. Es común escuchar que cuando un niño llora y tan pronto lo carga alguno de los padres, no falta quien comente: “¡Ya lo embracilaste!” (acostumbrarlo a tenerlo abrazado).
El abrazo en los adultos mayores
Los abrazos en las diferentes etapas de la vida son muy importantes, tienen un efecto positivo en nuestro estado de ánimo, principalmente en la primera infancia y en los adultos mayores. Las personas adultas mayores que tienen mayor contacto físico con sus familiares y reciben abrazos con más frecuencia se sienten más saludables y mejora su autoestima, mientras que quienes tienen pocas oportunidades de ser abrazados tienden a deprimirse y enfermar con más facilidad.
El abrazo a una persona en duelo
Un proceso de duelo por pérdida de un ser querido es la experiencia más dolorosa que podemos vivir, nos hace sentir desolados y desamparados, lastimados y vulnerables. En esos momentos es muy importante acompañar y abrazar. No vamos a mejorar su estado de ánimo mágicamente, pero con el pequeño gesto de abrazar estamos creando una conexión más profunda que la comunicación verbal, estamos tocando el alma de la otra persona.
¿Con que frecuencia abrazas?
Los factores culturales tienen una fuerte influencia en las personas que disfrutan abrazar o evitan hacerlo. Las personas que abrazan con mayor frecuencia a sus seres queridos son más liberales y mantienen un mejor estado de ánimo, mientras que las más conservadoras muestran con más dificultad sus sentimientos a través del abrazo.
¿Has sentido la necesidad de un abrazo?
En cierta ocasión andaba muy sensible y preocupada por la enfermedad de una de mis hermanas, sentí unas ganas inmensas de llorar. Al llegar al taller de oración, le dije a la guía que necesitaba un abrazo, de pronto me sentí abrazada por todos mis compañeros sin pedir explicación, fue un abrazo grande e intenso que destruyó mis miedos y me sentí querida, confortada y en paz. Cuando tengas la necesidad de un abrazo, no te avergüences por pedirlo, te trae sentimientos de bienestar.
Abrazar más
Es muy importante expresar nuestro afecto a través de abrazos, deberíamos de abrazar con mayor frecuencia, en este día en especial y todos los días. ¡Abraza más seguido a tus seres queridos! Un día tal vez no puedas volver a hacerlo. ¡Les mando un abrazo enorme!
